Múnich. El astro estadunidense de la natación Michael Phelps aseguró hoy que regresará a la competición en abril tras la suspensión de seis meses por conducir ebrio, pero dejó en el aire su presencia en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016.
Phelps, el nadador más exitoso de la historia, dijo que participará a mediados de abril en la Grand-Prix-Serie en Mesa/Arizona.
«Me siento de nuevo bien joven, como un niño», explicó Phelps, de 29 años, durante una presentación en la feria deportiva Ispo, que se celebra anualmente en la ciudad de Múnich.
«Nadar me da más alegría que nunca. Nadar es simplemente parte de mi vida», añadió.
El múltiple campeón olímpico fue suspendido por la federación de natación de Estados Unidos después de ser detenido a fines de septiembre de 2014 por la policía en su ciudad natal, Baltimore, por conducir bajo los efectos del alcohol y por exceso de velocidad.
Pese a haber acumulado 18 títulos olímpicos, Phelps aseguró que no piensa en estos momentos en poner fin a su carrera. El nadador renunció tras los Juegos Olímpicos de 2012, pero en 2014 volvió a las competiciones.
Phelps lamentó no poder formar parte del equipo estadounidense que disputará el campeonato mundial del 24 de julio al 9 de agosto en Kazan, Rusia. Además de la suspensión, fue tachado de la lista por el episodio policial. «Es frustrante», admitió.
El nadador no quiso adelantar si piensa buscar más medallas de oro en los Juegos de Río de Janeiro. «Veremos lo que ocurre en los próximos meses».
Phelps aprovechó su participación en un acto de patrocinadores para nadar unos largos en la piscina olímpica de Múnich. «Me dijeron que en el cuarto carril nadó Mark Spitz», señaló.
El estadunidense Spitz se colgó ocho medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Múnich, en 1972, una menos que las que conquistó Phelps en Pekín 36 años más tarde.
