A pesar de que se han conseguidos logros en materia laboral, aún persisten retos para reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres, consideró la senadora por Zacatecas y petista, Geovanna Bañuelos al participar en el “Foro Igual salario por trabajo de igual valor”, organizado por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en el marco del Día Internacional de la Igualdad Salarial.
La también presidenta de la Comisión de Trabajo y Previsión Social en el Senado de la República lamentó que actualmente una de las múltiples manifestaciones de desigualdad continúe siendo la disparidad salarial.
“En nuestro país, la disparidad en el ingreso es una realidad. Y en algunas entidades es mucho mayor que otras, como en el estado de Colima, Baja California Sur y Tlaxcala donde la brecha salarial es mucho más amplia; y caso contrario la Ciudad de México, donde nosotros celebramos que prácticamente estamos llegando a la paridad, porque de cada 100 pesos que gana un hombre, la mujer tiene un ingreso de 93 pesos”, detalló.
La senadora llamó a no omitir la lucha de las mujeres trabajadoras por el respeto a sus derechos laborales y su plena integración, así como participación en todos los sectores productivos del país ya que dijo, aún muchas mujeres tienen continúan realizando tareas domésticas y al mismo tiempo, competir por un empleo igual al de un hombre.
“En promedio, una mujer con licenciatura gana 11 mil 815 pesos mensuales, mientras que un hombre con licenciatura gana 16 mil 649 pesos”. indicó.
Lo mismo pasa si la mujer es cabeza de familia o comienza a formar su familia, pues la maternidad en México tiene efectos negativos sobre la participación en el trabajo, su remuneración y su desarrollo profesional.
“De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares del Inegi, un hombre con un hijo gana en promedio, trimestralmente 35 mil 248 pesos, mientras que una mujer con un hijo gana 22 mil 504 pesos”, mencionó.
Afirmó que, desde el Legislativo, se ayudará a cristalizar los compromisos que se hicieron de reactivar las becas en educación para las mujeres, la pensión para mujeres indígenas y afromexicanas de 60 a 64 años y la ley de cuidados.