■ Profesores buscaron lograr la distinción y convertirse en “verdaderos” maestros: Aguayo
La telesecundaria es una modalidad educativa que durante años ha impulsado procesos educativos en regiones y comunidades lejanas del medio rural zacatecano, pero además, ha forjado una identidad en su profesorado que no es vista en el resto del magisterio y que se generó por diversas circunstancias.
Luis Manuel Aguayo Rendón, coordinador de la maestría en Educación Básica de la Universidad Pedagógica Nacional Unidad 321 (UPN), señaló que, aislados por sus propios compañeros de secundarias técnicas y generales, y cercados por las condiciones salariales que asfixiaban su economía familiar (los salarios se tardaban y llegaban a través del supervisor, lo que añadía una componente de control sobre el profesor) se volvió un anhelo lograr la distinción, esto es la diferencia que era su sello distintivo.
De los esfuerzos por ser como el otro, de los intentos por ser “verdaderos” profesores es como se inició el proceso de institucionalización del sistema de telesecundaria, además de la construcción de un sindicato que, determinado por el rechazo del SNTE a considerarlos parte de sí, arrojó a los profesores de telesecundaria a la zozobra de construir su gremio en la diferencia.
“La búsqueda de pertenencia al SNTE y la construcción de estructuras y prácticas sindicales muy parecidas a esta vieja estructura político sindical, no hacen sino reafirmar el viejo anhelo imposible de los telerines. Buscar ser un verdadero profesor olvidando que no existe un imaginario único para ello y que es la diversidad el mejor sustrato para la construcción de identidades ricas, complejas y diferentes”, indicó el ex secretario de Educación.
Explicó entonces que la manera en la que se ha ido conformando la identidad de los profesores de telesecundaria no es un asunto menor porque los gremios y las sociedades que reconocen y se reconocen en su historia, esto es, aquellos que saben quiénes son y cómo es que han llegado a ser así, son los que mejores condiciones tienen para lograr las transformaciones.
Los elementos que fueron necesarios para completar la identidad y condiciones de esa modalidad educativa, fueron el televisor, entronizado en ese tiempo como la posibilidad de la gran tecnología educadora y los profesores venidos de todos lados, lo mismo de las normales rurales, de la Universidad, de los bachilleratos, que de otras partes.
