■ A finales de enero habrá 2 mil 600 jubilados y pensionados
Actualmente el Fideicomiso Fondo de Pensiones del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de Zacatecas (Issstezac) tiene poco más de 200 millones de pesos y el monto se ha empezado a estabilizar a partir de la reforma a la ley de dicha institución, dijo el titular de la dependencia, Víctor Rentería.
Es así que a la fecha, agregó, el Issstezac tiene 2 mil 400 jubilados, se acaban de autorizar 120 y además hay un listado de 100 trabajadores que esperan su pensión, de modo que a finales de enero se tendrán más de 2 mil 600 jubilados y pensionados.
A la par del Fondo de Pensiones se fortalecerá ya que con la posible venta de bienes inmuebles propiedad del instituto, el dinero se irá al fondo, así como ya lo hace 30 por ciento de las cuotas y aportaciones de los trabajadores.
Dichos datos los dio a conocer el director del Issstezac durante las conclusiones de la visita de los comisionados de la iniciativa Unión Europea para la Protección Social en Cooperación y Desarrollo, evento realizado ayer en el hotel Parador, donde miembros de la asociación Socieux y especialistas en temas de trabajo y seguridad social como Ignacio Camos y Hagen Hügelschäffer impartieron una conferencia para hablar de la situación de las pensiones en la Unión Europea y compartir experiencias.
Previo a ello, en entrevista Víctor Rentería informó que actualmente el Issstezac tiene mil 500 millones de pesos en propiedades y bienes, de los cuales no se tiene una cantidad respecto a cuánto han ascendido las pérdidas, pero en los próximos días la Junta Directiva del Issstezac analizará para ver posibles alternativas.
Hasta ahora se ha cerrado una mueblería en Jerez, cuatro farmacias en distintos municipios y se está a la expectativa de vender algunos negocios más por no generar rentabilidad al Instituto, pero todo dependerá del análisis que se haga con los legisladores y la Junta Directiva.
Respecto de los hoteles hay la posibilidad de asociarse con empresas privadas para que ayuden en la renta de habitaciones y salones. Es decir, no venderlos sino asociarse con “alguna cadena fuerte”, finalizó Rentería.
