La huelga por la jornada laboral de ocho horas iniciada por obreros de Chicago un primero de mayo de 1886, fue más allá de eso. En respaldo a la demanda, tres días después se desató una revuelta social que sería violentamente reprimida. Varios obreros -mediante un juicio ilegítimo y malintencionado- fueron condenados a cadena perpetua o trabajos forzados y cinco de ellos a la horca. Desde entonces, son conocidos en el mundo entero como los Mártires de Chicago y cada año es homenajeada su memoria.
Con excepción del Reino Unido y los Estados Unidos de América (que celebran su “Labor Day” el primer lunes de septiembre), el primero de mayo es considerado el Día internacional del Trabajo. En cada aniversario, la clase obrera y sus aliados toman las calles y enarbolan las demandas laborales y sociales más sentidas. Desde su inicio, junto al reconocimiento de los sindicalistas caídos, esta fecha se ha convertido en una gran oportunidad, recurrente y reivindicativa, donde la clase trabajadora puede apreciar su fuerza y medir la importancia de su misión histórica ante la población que sigue su marcha.
Ciento 28 años después de aquel acontecimiento, los trabajadores continúan en pie de lucha y resistencia contra los planes del capital. En México, la Nueva Central de Trabajadores (NCT) integrada por decenas de sindicatos democráticos e independientes, es la mejor prueba de ello. A través de este espacio, hacemos eco de su Manifiesto, en el marco de la coyuntura actual mexicana:
“Las trabajadoras y trabajadores de México estamos siendo víctimas de la peor ofensiva patronal vivida en tres décadas de gobiernos neoliberales. La triple alianza de partidos en el “Pacto por México” permitió, como nunca, el impulso e imposición de las reformas estructurales hasta hace poco frenadas por la lucha obrera y popular. Se ha impuesto la fuerza política, mediática y represiva de la oligarquía nacional, el capital financiero y las empresas trasnacionales, sin que los trabajadores y las fuerzas democráticas del país alcanzaran a levantar un bloque opositor… Con todo, el neoliberalismo y sus males, pensamos, son posibles de revertir”
“Los neoliberales no pueden cantar victoria… la férrea resistencia de sectores populares en movimiento se sostiene y continúa. En el perímetro continental de la Patria, no todo es tragedia, también hay esperanza en la rebeldía. Pueblos indígenas insurrectos, autonomías y resistencias rurales y urbanas, autodefensas comunitarias, clase trabajadora en proceso de reorganización, huelgas y paros; electricistas y maestros insumisos; acciones en defensa de la tierra, el agua, el aire, en fin, todo un conjunto de luchas populares, se libran a lo largo y ancho del país aunque en forma dispersa… Sostenemos que es posible reagruparnos en torno al combate a los neoliberales y a la necesidad de una Nueva Constituyente… La Nueva Central de Trabajadores asume la tarea de contribuir a esa reagrupación… Se trata de organizarnos como clase…”.
“La NCT rechaza cualquier censura en las redes sociales y los nuevos privilegios de los monopolios televisivos de TV Azteca y Televisa a partir de la imposición de la nueva Ley de Telecomunicaciones; califica de burla los recién aprobados “seguro de desempleo” y “pensión universal”; reclama la libertad de los presos políticos, exige solución inmediata a las demandas del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y del magisterio democrático de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE). Rechaza la quiebra fraudulenta de Mexicana de Aviación y repudia la agresión violenta de la empresa Teksid Hierro de México de Monclova, Coah. en contra de los compañeros mineros de base que buscan abandonar las filas del charrismo sindical de la CTM”.
“La Nueva Central advierte de la irreparable pérdida de la soberanía nacional con la puesta en marcha de la privatización de la electricidad y del petróleo, del ataque frontal en contra de la Contratación Colectiva de los trabajadores de CFE y Pemex”.
“Cobrar por adelantado la electricidad, escalonar el incremento del gas y la gasolina e incrementar el costo del sistema de transporte colectivo (Metro), son medidas antipopulares que contribuyen al repunte de la carestía y la pérdida del poder adquisitivo del salario. Debemos rechazar categóricamente las últimas resoluciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que acaba de “legalizar” el embargo del salario de quienes tengan adeudos con la CFE”.
“Recientemente, la reforma política de Peña Nieto canceló el principio del “sufragio efectivo no reelección” para admitir la reelección de diputados y senadores. La desconfianza en el régimen y sus procesos de legitimación y el distanciamiento de la clase política con los intereses populares y de la Nación, nos obligan a buscar nuevas alternativas de representación que nos permita trazar nuestra propia ruta de emancipación, asumiendo nuestra autonomía de clase en la lucha política nacional respecto de los partidos políticos de la izquierda institucional, buscando siempre… una sociedad libre y democrática, sin explotados ni explotadores”.
“La Nueva Central de Trabajadores hace un llamado a todas las organizaciones democráticas de trabajadores del país, a incorporase a este esfuerzo…. a que hagan contacto con nuestros militantes para ir procesando juntos la reorganización de nuestras fuerzas”. ¡¡Solo caminando juntos alcanzaremos la VICTORIA!! ■
*Fuente informativa: Nueva Central de Trabajadores [email protected]
