Nutrir y cuidar la comunidad, la conexión y el respeto con el medio ambiente, la importancia del juego y de la diversidad son algunos de los mensajes que los talleristas Sara Miranda y Dagoz están sembrando junto con niñas, niños y adolescentes que participan en su taller de arte mural.
Todos los días, hasta el 31 de marzo (con excepción del Viernes Santo), el taller continuará sus actividades en la Plazuela 450, en horario de 10 de la mañana a 1 de la tarde, involucrando menores de hasta 16 años en los procesos de creación de un mural.
Definir el mensaje, concebir el diseño, dibujar, mezclar color y aplicarlo en la pared son procesos que las y los asistentes al taller disfrutan durante los bloques de media hora en los que se organiza la actividad. De esta forma, pueden participar también en los otros talleres que se ofertan en el mismo foro, entre los que se incluye cerámica, papalotes y programación de un robot.
Este taller ha tenido muy buena asistencia y es un espacio en el que diariamente tienen lugar un sinnúmero de experiencias para los infantes, desde el bebé que plasma su primer brochazo de pintura, hasta la niña que aprende a mezclar los colores para conseguir su tono predilecto de morado con el que pintará su cuarto. Todas y todos tienen algo que expresar y algo con que conectar en este taller.
La Colectiva Siembra, a cargo de este taller, invita a niñas, niños y adolescentes a que asistan desde temprano, con ropa cómoda y que pueda ser manchada con pintura, para que experimenten por medio de brochazos y mezclas de colores, la conexión con la colectividad que generan de forma única el arte urbano y el arte mural.