Dublín. Decenas de miles de personas se manifestaron el sábado en Dublín contra la decisión del gobierno de Irlanda de facturar el agua del grifo, que hasta ahora era gratuita.
«Tenemos un objetivo, anular esta ley», declaró Brendan Ogle, uno de los organizadores de la manifestación, la última de una serie que reunió a varias decenas de miles de personas desde septiembre.
El sábado, la policía se negó a brindar una estimación del número de participantes, pero los organizadores dijeron que eran 80 mil. El canal de televisión RTE dijo que había entre 30 mil y 40 mil personas.
«No es sólo por lo del agua que ya pagamos con nuestros impuestos. También se trata de los recortes en las jubilaciones», declaró Deirdre, una manifestante originaria de Dublín. «Yo tengo la suerte de tener trabajo, pero no ha habido aumento de salarios desde hace seis años, al tiempo que se multiplicaron los nuevos impuestos», agregó.
Muchos manifestantes esgrimían banderas del partido opositor y antiausteridad Sinn Fein.
Irlanda se había comprometido a cobrar el consumo de agua en el marco de un plan de ayuda financiero del Fondo Monetario Internacional y de la Unión Europea adoptado en 2010 para evitar la bancarrota del país.
En noviembre, el gobierno había aceptado reducir la factura que habrán de pagar los hogares irlandeses a partir del mes que viene, la cual se situará entre 60 y 160 euros, pero se niega a renunciar a cobrar totalmente el consumo de agua.
