Editorial Gualdreño 651
Dice el Dr. Eduardo Matos Moctezuma, que el patrimonio cultural de México es “todo aquello que nos caracteriza como mexicanos. Son nuestros vestigios tanto prehispánicos como coloniales e históricos, todo lo que las generaciones anteriores nos legaron y que forman parte sustancial de nuestra historia” (1); quise iniciar las ediciones de este año nuevo con esa reflexión que nos lleva a definir -retomando sus palabras- lo que es el patrimonio cultural de Zacatecas: el patrimonio cultural zacatecano -tangible e intangible- es lo que nos caracteriza, lo que las generaciones anteriores nos legaron, los vestigios o huellas prehispánicas, coloniales e históricas.
Fue la conservación de esos vestigios históricos legados por nuestros antepasados lo que dio pie a que, después de un arduo proceso para cumplir con los requisitos internacionales, el centro histórico de la ciudad de Zacatecas fuera incluido en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO el 11 de diciembre de 1993.
Las labores de registro y conservación patrimonial iniciaron a principios del siglo pasado, cuando el pintor Manuel Pastrana se dio a la tarea de hacer la catalogación de los bienes patrimoniales tras la toma de Zacatecas; esas actividades las realizó con el nombramiento de Inspector Local Honorario y Conservador de los Monumentos Coloniales de la República y como Inspector de Monumentos Artísticos de Zacatecas entre la segunda y tercera década del s. XX; luego, a finales de la década de los 40, don Federico Sescosse y los otros integrantes del Patronato Cultural de Zacatecas -posteriormente llamado Sociedad de Amigos de Zacatecas-: Genaro Borrego Suárez del Real y Eugenio del Hoyo Cabral, retomaron el objetivo de lograr que Zacatecas fuera un ejemplo nacional en materia de conservación del patrimonio edificado e iniciaron con el proyecto de restaurar el ex templo de San Agustín.
A la par del proyecto de restauración de San Agustín, el Patronato Cultural de Zacatecas organizó, en 1955, un curso sobre arquitectura barroca e historia del arte que fue impartido por Francisco de la Maza tomando como referente a los edificios del centro histórico; además de participar integrantes de la ciudadanía interesados en historia del arte, fueron convocados también integrantes del clero -sacerdotes y seminaristas- en el entendido de que al sensibilizarlos en los temas de conservación y preservación del patrimonio edificado, Zacatecas tendría en ellos aliados indispensables para resguardarlo.
Las labores de conservación patrimonial continuaron, de tal suerte que 1953 se creó la Ley de Protección y Conservación de Monumentos y Edificios del Estado de Zacatecas; y en los 60 se promulgó la Ley de Conservación de Monumentos de las Zonas Típicas del Estado de Zacatecas y se integró lo que hoy conocemos como Junta de Monumentos -concebida como un organismo encargado de vigilar la operatividad de esa ley-.
En 1993, tras un largo esfuerzo institucional y ciudadano realizado, el centro histórico se integra a la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Actualmente, México es el primer país en América Latina y el séptimo a nivel mundial con el mayor número de bienes reconocidos por la UNESCO, con un total de “35 sitios inscritos: 27 culturales, 6 naturales y 2 mixtos (2)”, entre ellos se encuentra nuestro centro histórico que ingresó en la lista primordialmente por su paisaje cultural (traza urbana conservada hasta nuestros días) y por el valor único y excepcional de la Catedral Basílica de Zacatecas.
El gobierno de México como Estado Parte de la Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de la UNESCO, está comprometido a realizar labores de conservación y protección de los 35 bienes inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial. No obstante, en Zacatecas, hoy tenemos una puerta norte de catedral intervenida inapropiadamente el año pasado y cuyo daño es irreversible -de ahí que se encuentre temporalmente cubierta para evitar que los factores climatológicos le afecten más-; y el ICOMOS México ha afirmado que, si el paisaje cultural de nuestra ciudad resulta afectado por acciones de terceros, el nombramiento de Patrimonio Mundial entrará en la lista de riesgo y posteriormente procederá su retiro del listado.
Así iniciamos el año. A pesar de lo anterior, les deseo, estimados lectores, un muy buen 2025. Estamos de regreso.
Que disfrute su lectura.
Jánea Estrada Lazarín
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(1) Matos Moctezuma, Eduardo, “Patrimonio Cultural de México. Mitos y verdades”, Revista Arqueología Mexicana, en: https://arqueologiamexicana.mx/mexico-antiguo/patrimonio-cultural-de-mexico#:~:text=El%20patrimonio%20cultural%20de%20M%C3%A9xico,parte%20sustancial%20de%20nuestra%20historia
(2) https://www.gob.mx/cultura/articulos/patrimonio-mundial?idiom=es#:~:text=José%20Alfredo%20Jiménez-,¿Sabías%20que%20México%20es%20el%20primer%20país%20en%20América%20Latina,bienes%20reconocidos%20por%20la%20UNESCO%3F