Washington. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, tiene «en sus manos» los mecanismos para destrabar un posible intercambio de presos con Cuba, dijo este martes en una videoconferencia un exagente cubano que cumplió pena en cárceles estadunidenses.
«Cualquier herramienta que el presidente estadunidense utilice en este caso será bienvenida. Y el presidente tiene las herramientas en sus manos», dijo desde La Habana el exagente René González.
González era uno de los cinco cubanos detenidos en 1998 y condenados por espionaje en Estados Unidos. Después de cumplir su sentencia, retornó a Cuba hace un año. Otro de los exagentes, Fernando González, cumplió su pena y retornó a la isla en febrero de este año.
El Departamento de Estado pide que Cuba libere al estadunidense Alan Gross, arrestado en 2009 en La Habana por introducir clandestinamente sofisticados equipos de telecomunicaciones, alegando «razones humanitarias».
En contrapartida, Cuba sugiere una negociación bilateral sin precondiciones que ponga sobre la misma mesa el caso de Gross y el de los tres agentes cubanos que aún cumplen pena en cárceles estadunidenses: Ramón Labañino, Gerardo Hernández y Antonio Guerrero.
Durante la videoconferencia, René González recordó que recientes sondeos indican que la mayoría de los ciudadanos estadunidenses está de acuerdo con un cambio de política que permita regularizar las relaciones con Cuba.
Por ello, apuntó, un eventual intercambio de presos entre Estados Unidos y Cuba expondría a Obama a menos críticas que las enfrentadas a causa del reciente canje de un soldado estadunidense por cinco talibanes detenidos en la base de Guantánamo.
Tal gesto, señaló, «tendría mayor aprobación por parte de la sociedad estadounidense, de lo que podría tener la liberación de cinco talibanes».
En tanto, al referirse a las resistencias internas en Estados Unidos a un nuevo intercambio de presos, Fernando González admitió que no le era posible «encontrar una explicación para que (Obama) pueda hacerlo en un caso y no lo pueda hacer en otro».
«Para mí, es evidente la contradicción. Yo espero que, independientemente de las reacciones adversas, el presidente tenga la disposición de adoptar una decisión en este caso», añadió.
Por el momento, el gobierno estadunidense ha cerrado la puerta a la posibilidad de un entendimiento con Cuba que permita tanto la liberación de Gross como de los cubanos Labañino, Hernández y Guerrero.
