■ La educación y la conciencia ciudadana, pilares para encontrar la luz al final del túnel, dijo
■ Ofrece el ex vocalista de Caifanes espectacular concierto en el Centro Histórico de la capital
Podrás quemar toda mi historia/ podrás quitarme la razón/ podrás esconderme la memoria pero jamás mi corazón. (…) Podrás mentir sobre mi tumba/ podrás ocultar mi nacimiento/ podrás enterrar mis deseos pero jamás tentarás mi corazón. Y es que hoy estoy fuerte/ más fuerte que nunca.
“Si queremos cambiar este país, está en nuestras manos”, les recordó Saúl Hernández a los asistentes al concierto que dio la noche de ayer en la plazuela Miguel Auza, antes de dedicarle la canción Fuerte a los estudiantes de Ayotzinapa, las muertas de Juárez y a todos los niños que están sufriendo en México.
Previamente, en conferencia de prensa y refiriéndose al video de la composición mencionada, el cantante reiteró que ante la realidad que estamos viviendo en nuestro país no es posible quedarse al margen, “me pareció importante no cerrar los ojos, me pareció importante que el video reflejara la realidad de la gente y no la realidad de un artista”.
Así, concluyó, el artista sólo es la justificación para mostrar una situación social y política que se vive en el país y que, como se enumera en el video, es representada por casos como Tlaltelolco, Aguas Blancas, Acteal, Guardería ABC, Atenco, las muertas de Juárez y Ayotzinapa.
En el concierto que abarrotó la plaza Miguel Auza, el ex vocalista de la histórica banda Caifanes alternó canciones de su último disco como solista con las que lo catapultaron como uno de los íconos más representativos del rock mexicano.
El ambiente festivo y nostálgico se combinó con el mensaje político que no sólo venía de las intervenciones de Saúl, sino también de las imágenes que aparecían intermitentes: un combativo Siqueiros, unos migrantes o campesinos en lo alto de una montaña y los rostros, cínicos, de ex presidentes y políticos que se ganaron la rechifla de la multitud.
Pero no todo está perdido. Nuevamente en la conferencia de prensa, el compositor refirió la posibilidad que existe para ver “la luz al final del túnel”. Recuperar la conciencia como ciudadanos es uno de los pilares del cambio que se necesita en México.
Un cambio que parte de que “nuestro sistema político es como un enfermo terminal, un cáncer muy horrible, mucha corrupción, mucha impunidad; pero nosotros estamos libres de eso y creo que recuperar nuestra conciencia, saber quiénes somos, a dónde vamos, por qué estamos aquí; podemos encontrar el hilo conductor para recuperar nuestro camino”.
Otro de los cimientos del cambio, “muy poderoso”, es la educación, y sobre todo, dijo, “en este país en el que hemos sido castrados durante sexenios”. Pero Saúl volvió a la carga: “Einsten dijo una vez que una sociedad preparada es una sociedad libre, yo quiero quedarme con esa idea de que la educación puede ser una estructura muy fuerte para recuperar la esperanza para que este país cambie”.
