■ La repatriación de los padres conlleva consecuencias de desintegración familiar, advierte
■ Necesario, relación directa entre ambos gobiernos y estudios sobre los casos de migrantes, señala
En México no existen estadísticas acerca de los hijos de mexicanos que, a causa de las leyes migratorias, se quedaron solos en Estados Unidos debido a la repatriación de sus padres a territorio mexicano.
Así lo explicó el docente investigador de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Miguel Moctezuma, quien aseguró que como estos hechos “suceden en Estados Unidos” el gobierno mexicano se queda al margen. No obstante, sostuvo que las autoridades nacionales deberían tener datos al respecto.
El abandono forzado de estos menores al otro lado de la frontera norte tiene consecuencias graves de desintegración familiar, pues implica que estos niños y jóvenes sean en ocasiones dados en adopción a personas que tengan parentesco con los repatriados o, incluso, a ciudadanos estadunidenses sin relación con la familia que fue obligada a separarse.
Por lo tanto, concluyó Moctezuma, ese “es todo el drama que implica y el sufrimiento tanto de los padres como de los hijos. Pero además los padres pueden realmente perder a sus hijos y eso ha sucedido en muchos casos”.
Sostuvo que “eso es una actitud muy discriminatoria que se podría resolver si la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México registra a esos menores como binacionales, es decir, como niños que tienen la doble nacional para que no sea un problema puramente familiar”.
El académico del doctorado en Estudios del Desarrollo de la UAZ aseveró que por todas las consecuencias humanas y sociales que tienen las separaciones de las familias a causa de la legislación vigente, éstas deben abordarse desde la perspectiva de los derechos humanos y, en particular, de los derechos de los menores, tanto niños como jóvenes.
De esta forma, explicó, podrían intervenir instancias internacionales como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) a través, por ejemplo, de su Fondo para la Infancia (Unicef).
Hasta ahora, comentó, lo que ha impedido que haya avances positivos en esta materia ha sido la falta de una relación directa “de gobierno a gobierno” entre Estados Unidos y México, la ausencia de estudios necesarios para conocer a fondo los casos de separación de las familias a consecuencia de las leyes migratorias, así como el hecho de que el gobierno mexicano “no está haciendo nada en relación con la reforma migratoria, porque creo que con reforma o sin reforma esos aspectos podrían defenderse desde el punto de vista de los derechos humanos, pero los gobiernos no se han movilizado”.
Pese a no haber estadísticas de los hijos de connacionales que se quedan solos en territorio estadunidense tras la deportación de sus padres, el Instituto Nacional de Migración sí posee las cifras del número de menores que son repatriados a México.
En este sentido, en los meses de enero y febrero de este 2014, que es el corte que se tiene hasta la fecha, hubo un total de 2 mil 578 repatriaciones de mexicanos menores de 18 años desde los Estados Unidos. Los zacatecanos de estas edades que fueron obligados a regresar al territorio nacional fueron 46 y, de ellos, 74 por ciento lo hicieron solos.
Mientras tanto, durante todo el año pasado fueron repatriados 246 zacatecanos de hasta 17 años de edad, de los cuales 78 por ciento no iba acompañado; y en 2012 la cifra total de los ciudadanos de Zacatecas que regresaron forzosamente a México fue de 347 y de estos 70 por ciento llegó sola.
