UNO: Fresnillo: Proponen salarios de 10 mil pesos mensuales para gobernantes.
DOS: ¿Eliminar o transformar a los partidos políticos?
TRES: Feliz año nuevo, infeliz salario mínimo.
COLOFÓN: Hasta pronto.
UNO: “Haz el bien sin mirar a quién”
En Fresnillo comienzan a formarse grupos de ciudadanos indignados por lo que consideran pésimos gobiernos en los últimos años en su municipio.
Están hartos no sólo del partido que ahora los gobierna, sino también del que los gobernó antes de éste.
Para los ciudadanos, los políticos se pervierten al llegar al poder.
Respecto al PRI, reprueban la división y los pleitos que ahora exhiben sin pudor los partidarios del alcalde Gilberto Dévora y el diputado Benjamín Medrano.
También se declaran hasta el gorro de las familias de los Mon… tescos y los Bon… itos.
Y censuran a los candidatos que se promocionan como independientes y ya militaron hasta en el Partido Verde.
A final de cuentas, insisten, ellos votarían sólo por quien les prometa y cumpla la asignación de un salario máximo mensual de 10 mil pesos para presidente, síndico, regidores y directores de área.
Según sus cálculos, así se ahorraría tan sólo en Fresnillo 500 mil pesos mensuales.
Y se incrementaría la posibilidad de ayudar a más personas y de veras proponerse acabar con la pobreza.
¿Quién le entra, pero de a de veras?
DOS: “Haz ruido y sacarás partido”
Coinciden analistas políticos en que hay por lo menos dos tipos de “independentismo”: uno que forma su propio “partido” a partir del “reclutamiento” de ciudadanos para que confíen en él, y otro que trina rabiosamente contra todo lo que huela a partidos políticos y propone su franca eliminación.
Ejemplos de unos y otros pueden verse en cualquier parte del país.
En estos momentos resulta innegable que los partidos políticos pasan por la más fuerte crisis de credibilidad.
No sólo en México: pueden echar un ojo a lo que sucede en España, por ejemplo.
La cuestión es que al momento no existe un país desarrollado que funcione sin partidos políticos.
Llámenle mal necesario o como quieran, pero es la realidad.
La solución no es desaparecer a estos partidos, sino transformarlos y de paso brindar las condiciones de igualdad para los independientes.
Piso parejo para todos, pues.
TRES: “Fiesta sin comida no es fiesta cumplida”
Amigos lectores nos invitan a reflexionar en torno a lo que dice el famoso artículo 123 de nuestra Constitución, en su sexta sección:
“Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos. Los salarios mínimos profesionales se fijarán considerando además las condiciones de las distintas actividades económicas”.
Bien visto, comentan, nuestra realidad es anticonstitucional, pues ahora el salario mínimo apenas rebasa los 70 pesos por jornal y el sustento cotidiano para una familia es de 200 pesos.
Así no se puede.
Ojalá que 2016 implique un verdadero despegue para la economía mexicana, y que deje de faltarse el respeto a un artículo constitucional.
COLOFÓN: “A su tiempo maduran las uvas”
Para este humilde refranero y todo su vasto equipo, hoy termina el 2015 de jornadas, el 2015 laboral.
Pero nos reencontraremos en 2016, en su cuarto día concretamente, con la esperanza de comentar mejores nuevas y trascendidos.
@ElRefranero_ljz
