■ Hay un escenario de alta competencia entre los partidos PRI y Morena: Leopoldo Trueba
■ Resultados podrían generar que en el cierre de las campañas se den actos de “guerra sucia”
Como una contienda electoral cerrada y que al final, por la “desesperación”, podría derivar en una “guerra sucia” entre los principales candidatos a la gubernatura. Así fue definido el actual proceso de elecciones en Zacatecas por los académicos de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), Leopoldo Trueba y Marco Torres Inguanzo, durante el programa Synergia, realizado por La Jornada Zacatecas TV y conducido por el director de esta casa editorial, Raymundo Cárdenas Vargas.
Trueba, quien también es director del Laboratorio de Estadística y Matemática Aplicada de la Universidad, consideró que hay un “escenario de alta competencia electoral” entre los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), en caso de que la candidatura le sea devuelta a David Monreal Ávila.
Informó que por parte del laboratorio que dirige se realizó una encuesta en el mes de marzo, antes de que iniciaran las campañas, y en la que los resultados arrojaron que en primer lugar estaba Alejandro Tello Cristerna, candidato de la alianza PRI-PVEM-Panal; seguido de Pedro de León Mojarro, quien aún estaba en disputado por la candidatura del PRD-PAN; y en tercer lugar se encontraba Monreal Ávila, de Morena. “Con ese escenario nos fuimos a las vacaciones de Semana Santa”.
Consideró que cuando el tribunal determinó que Rafael Flores Mendoza fuera finalmente el candidato a gobernador por la alianza entre el Sol Azteca y Acción Nacional, “el PRD-PAN perdió expectativas”.
Esto debido a que, en base a las mediciones que se han estado haciendo desde el año 2013, fecha en la que tuvieron lugar las elecciones federales, y en concreto a las encuestas realizadas entre enero y febrero de este año, Flores Mendoza era identificado como un “candidato de región” puesto que no tenía presencia en todo el estado, a diferencia de De León Mojarro.
Esto apunta a una desventaja de la alianza citada, agregó, ya que tanto Monreal Ávila como Tello Cristerna “ya habían construido sus candidaturas”, mientras que el abanderado del PRD-PAN “apenas va a empezar”.
En este sentido, concluyó que “este periodo electoral, que es abril y mayo, es tiempo de cosecha, no de siembra. Si intentas construir una candidatura ahora, no va a ser posible. Vas a cosechar lo que sembraste en meses y años pasados”; por lo que con la decisión final que se dio en la alianza PRD-PAN, indicó que estos partidos “perdieron el interés ante el electorado”.
Por esta razón, comentó que la contienda se cerraría en torno a los candidatos del PRI y de Morena para la gubernatura.
Por su parte, el académico Marco Torres Inguanzo coincidió en señalar el posicionamiento que ya había logrado Pedro de León Mojarro cuando le quitaron la posibilidad de ser el candidato. Por ello, opinó que aun sin ser abanderado de ningún partido va a jugar un papel esencial.
Al respecto expuso que, si ya de manera independiente está buscando De León Mojarro una confluencia de las fuerzas de izquierda, pues se ha acercado con el Partido del Trabajo y con Movimiento Ciudadano, “si el escenario es de un empate técnico entre Tello y David, es muy probable que vayan a reforzar a David; (es decir), que Pedro se vaya ahí y no al PRI”.
Victimización de Monreal le
beneficiará, concluyen
El conductor del programa Synergia, Raymundo Cárdenas Vargas, planteó la pregunta de si tendría algún efecto el hecho de que la “medida desproporcionada” que el Instituto Nacional Electoral (INE) tuvo hacia Monreal Ávila retirándole el registro victimizará a quien era abanderado de Morena a la gubernatura.
En respuesta, los académicos apuntaron que sí habría consecuencias para Monreal Ávila pero estas serán positivas. Leopoldo Trueba sostuvo que, en sondeos que se han elaborado, entre 40 y 50 por ciento del electorado “está inconforme” con que se le haya retirado la candidatura.
Mientras tanto, Torres Inguanzo señaló que “esto se puede convertir en un detonante de la intención de voto” a favor de Monreal Ávila.
Guerra sucia por desesperación
El hecho de que las encuestas presenten resultados tan cerrados podría generar que en el cierre de las campañas se den actos de “guerra sucia” entre los principales contendientes a la gubernatura.
Marco Torres Inguanzo consideró como posible esta situación y dijo que “todo el debate programático” quedaría desplazado. Expuso que ahora ha habido ciertos diálogos en cuestión de propuestas, aunque estos no han sido por iniciativa de los candidatos sino por la opinión pública y los medios de comunicación que han buscado introducir diferentes temas de política pública al discurso de las campañas.
Leopoldo Trueba aseveró que la guerra sucia puede venir motivada por la “desesperación”, es decir, si el resultado de las encuestas continúa en la misma tónica, “el PRI va a entrar en proceso de pánico y el pánico es mal consejero y posiblemente esas campañas sucias empiecen a salir a flote porque el único objetivo es ganar”.
Torres Inguanzo agregó en este sentido que, en caso de que David Monreal recupere su candidatura, la victimización que tuvo con la decisión del INE le ayudará en ese periodo de guerra sucia pues será “el que está más vacunado”.
