¿Qué pasa en la UAZ? ¿Qué es la UAZ? Preguntas para múltiples actores, convocan múltiples respuestas. ¿Quién pregunta? Cualquier universitario o ciudadano de Zacatecas interesado por la UAZ, su Universidad. A partir del ICAZ, fue creada por Decreto el año de 1968, al ocaso del gobierno del Ing. José I. Rodríguez Elías. Después, en 1971, algunos estudiantes y maestros de la Escuela de Economía, Derecho y la Prepa, convocaron a discutir la construcción institucional y académica de la UAZ, mediante un evento público, el Simposium de Reforma Universitaria. Ahí se promovió y planteó lograr su integración institucional y académica; emanó su primera legislación y la reforma de los planes de estudio de escuelas como la Preparatoria, Economía y Derecho, etc., cuyas comunidades académicas debatieron y delinearon para una nueva etapa, su operar institucional y académico, razón de su existencia y quehacer universitario, bases para su futuro desarrollo y el de la UAZ. Así culminaron los anhelos de aquellas autoridades y estudiantes. Aunque el primer logro fue la autonomía del ICZ, básica para la existencia y operar del ICAZ, luego de la UAZ. La autonomía universitaria ni es, ni significa condición que autonomiza del entorno local, estatal, nacional, mundial; al contrario, es condición para procesarlo con libertad académica y el compromiso de contribuir con egresados capaces de operarlo y transformarlo… en bien de las mayorías, a pesar del mercado. Compromiso académico y político / político y académico, holístico: desde lo interdisciplinar como objetivo y realidad, para lidiar mejor con la complejidad de problemas concretos o contribuir sus instancias o egresados a generarla, procesarla o incrementarla, según sea la meta o la necesidad, no cualquiera, sino una social – popular. Cientificidad y técnica de universitarios al servicio de sus creadores originarios: el pueblo de Zacatecas y sus instancias institucionales.
Hoy, la UAZ continúa como institución integrada por estudiantes, maestros y autoridades, zacatecanos o no de origen, todos son universitarios que la integran, impulsan, desarrollan o contienen. Igual que ayer, en los zacatecanos y sus instituciones, en su participación y contribución descansa el hacer posible su operar y desarrollo como máxima institución educativa universitaria de Zacatecas, cuya autonomía, en la actual complejidad incrementada, es condición para el despliegue cotidiano de su devenir o el histórico, cuando el largo plazo impone hacer pausas para reflexionar, rehacerse o reformarse con base en los resultados de vigilar y estudiar, historia, tendencias, itos, coyunturas.
Si la UAZ tiene problemas o se le imputa incurrir en excesos, lo primero es convocar a indagar y delimitar a su interior y en su entorno de qué se trata, para saber si es algo generado por ella y su administración y comunidad pueden resolver o no. Sin obviar la responsabilidad de las instancias de gobierno universitario para modular con anticipación aquellas condiciones, internas o externas, convertidas en un problema financiero, por varias razones, no resuelto antes en su totalidad por tratarse de soluciones de tipo evenencial y no estructural, como hoy se necesita.
¿Qué trabó la solución? La autonomía universitaria es riesgosa condición de existencia institucional, su ejercicio impone lo académico como primordial para todos los universitarios, cualquiera sea su condición institucional: profesor, trabajador o funcionario. Lo universitario implica actuar más allá de caprichos personales, grupo o ideología. Por ello las instancias de gobierno universitario –integradas por universitarios electos, de acuerdo a reglas- operan mediante propuesta y debate en torno a los problemas existentes, sometidos con la debida formalidad y oportunidad a su consideración, como universitarios. En la UAZ, novedades y problemas cotidianos, en un ambiente de autonomía, eventualmente se condensan, emergen e institucionalmente se facilita reconocerlos, pensarlos, discutirlos y sugerir o encontrar, mediante estudios y debates de distinta intensidad, formas para enfrentarlos que ofrecer a quienes los sufran, en concreto.
La UAZ, por su continua labor de educación, investigación y extensión es la institución educativa de mayor relevancia en el Estado de Zacatecas; cuenta con un potencial, veces relegado u olvidado, para concurrir a fomentar y generar proyectos para su desarrollo o evitar su atraso. Tras semejante institucionalidad académica universitaria instituyente bulle una pluralidad interna que eventualmente se condensa en construcciones (organizaciones) formales e informales de universitarios, que influyen desde una particularidad el despliegue de la complejidad y diversidad académica universitarias.
Semejante devenir luego se triza por los anhelos personales y de grupo con que sus integrantes generan una peculiar cultura interna, no centrada sólo en lo académico. De hecho, la política universitaria se teje con las diversas aportaciones políticas de los universitarios, en lo individual u organizados como grupos o corrientes ideológico – políticas con potencial de opinión y acción, dentro y fuera de la UAZ, sobre temas considerados torales por ellos. ¿Torales para la UAZ, en su conjunto?
Aunque usual, es riesgoso agrupar a los universitarios bajo una ideología: izquierda, centro o derecha. La objetividad académica obliga a procesar en clase la realidad más allá de la personal ideología y lo profesoral pone su énfasis en la academia. Una, arraigada en la realidad, aunque abstracta para evitar su vulgarización. ■
