Se atendieron 278 llamadas relacionadas con Covid-19 en el lapso de una semana, además, la Unidad de Género brindó cuatro acompañamientos a víctimas de violencia familiar y atendió 40 reportes.
Autoridades destruyeron un campamento y un puesto de vigilancia en una semana; también fueron atendidas 264 llamadas relacionadas con Covid-19 en el mismo lapso.
Las agresiones ocurrieron en las comunidades Estación San José, Río Florido y Rancho Grande, así como en el entronque a Nuevo México, en la zona centro y en la carretera al municipio de Río Grande. Todas las víctimas corresponden a personas del sexo masculino.