Historia y Poder
Durante cientos de años nuestro pueblo aguardó fielmente las reglas para convivir y ser parte de un gran conglomerado en el que el espíritu del trabajo y la sumisión a las reglas civiles dieron riquezas enormes a la economía nacional, al mismo tiempo que le permitió sobrevivir y decorar su ciudad que hoy es considerada como Patrimonio Histórico de la Humanidad.
Cada piedra, cada edificio, cada calle o callejón mantienen los rastros del ablandamiento de las oposiciones o las desproporciones del dominio inmaculado que engañó a las mayorías con el castigo divino y la pena corporal, el litigio de las cárceles repletas o las calles llenas de masas hambrientas exigiendo mendrugos, paz a sus hogares, justicia popular sin concesiones.
Duele profundamente la tragedia acontecida en Mazapil en contra de los peregrinos, es injusto que ello ocurra cuando los peregrinos se dirigían a refrendar su devoción a Nuestro Padre Jesús y es un duro golpe que queda registrado en los anales de la historia zacatecana.
Profunda herida y duelo en la historia de nuestra patria chica afligida y conmocionada, la consternación debe llevarnos a los cambios verdaderos en que un día no muy lejano reine la justicia y la solidaridad de todos y para todos. Mazapil es hoy, nuevamente, noticia en el dolor y la tragedia, el más grande municipio con sus personajes, dolores y esperanzas que deben levantarse para continuar en el largo camino de su destino y su nueva historia.
La historia de Zacatecas ha apuntado lo valeroso de su pueblo en múltiples episodios que lo llenaron de gloria o pesadumbre y le dieron a la escena nacional hombres y mujeres de talla humanitaria y audaz, pero sin arrogancias, en su largo peregrinar por los tiempos en busca de la paz tan anhelada y con vigorosas decisiones respondiéndole a cada circunstancia penosa o de victoria.
Como nunca antes los cronistas de la historia zacatecana deben de apuntalar los gestos nobles y humanitarios de su gente, mencionar con mesura y claridad de sus gestas y etapas en que lo han conformado como un pueblo dispuesto a rifársela y enseñorear su futuro con acciones concretas y el trabajo honrado.
Mazapil presente en el duelo y la consternación. Su historia es implacable. ■
