■ El Mirador de Heródoto
Respecto al Teatro Calderón: “Es una gran responsabilidad contar con este espacio, pero con esa misma responsabilidad la Universidad lo asume y lo pone al servicio de la sociedad. Es un emblema, es el corazón de Zacatecas.”
José Antonio Rocamontes (2012)
El Estado mexicano, en su rol de representante de la sociedad, habiendo consagrado en su Constitución Política el derecho a la educación, se convierte por ello en garante de este derecho. Sin embargo, en los hechos éste se encuentra gravemente quebrantado, lo cual no es un problema de posibilidades económicas, sino que tiene como raíz la adopción de un proyecto de país sustentado en los lineamientos del neoliberalismo económico impuesto por instancias internacionales como el Banco Mundial y por la clase empresarial del propio país.
Caso concreto es la crisis que en el rubro de financiamiento padece la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), situación que la orilla a limitar su matrícula y la realización de muchas de sus actividades sustantivas.
Sin embargo, la comunidad de la UAZ, consciente de la importancia que tiene la educación superior pública para el desarrollo del país y de Zacatecas, trabaja en un ambiente austero y rinde resultados que le generan sensación de logro, reto cumplido, barreras superadas, sensación de futuro mejor. Entre los objetivos alcanzados en la segunda quincena del pasado marzo están los siguientes:
La Unidad Académica de Medicina Humana y Ciencias de la Salud, Alma mater de la medicina zacatecana, bajo la dirección de los doctores Genaro Ortega Monjarás y Juan Carlos Medrano Rodríguez, del 16 al 18 de marzo llevó a efecto la edición XXXVIII de sus Jornadas Médicas, evento con prestigio nacional propicio al intercambio constructivo de experiencias, que concentró a médicos con alto nivel profesional de diversos estados del país.
Se aprovechó la ocasión para entregar sendos diplomas a los doctores Armando Longoria Martínez y José Luis Alvarado Acosta, como reconocimiento a su ejercicio docente permeado por encomiables valores científicos, éticos y humanísticos al interior de la institución.
Otro evento destacado en la UAZ fue la reacreditación por el CNEIP de la Licenciatura en Psicología. Lo anterior responde a las exigentes metas que se han trazado la directora de la UAP, M en C. Laura Martínez Hernández y sus colaboradores.
En distinto ámbito universitario, como respuesta a su compromiso de formar a los profesionistas del mañana, la Maestría en Ingeniería y Tecnología Aplicada de la UAIE, coordinada por el Dr. Rodrigo Castañeda Miranda ingresó al Padrón Nacional de Posgrados de Calidad del Conacyt.
Al respecto el Rector Armando Silva Cháirez, señaló que las acreditaciones permiten a la UAZ mostrar credenciales sobre la calidad de su oferta formativa, luego de pasar por exigentes procesos de evaluación.
Entre las múltiples funciones que realiza la UAZ, una de ellas destaca en estos días a nivel social. Se trata de su faceta como uno de los motores culturales en la ciudad de Zacatecas, incluyendo como recurso al teatro Calderón.
Tan importante ha sido y es el teatro Calderón para la difusión de la cultura en Zacatecas que su fascinante historia ha sido escrita y ponderada por especialistas en la materia y hoy en día existe una respetable cantidad de escritos que dan cuenta de su vida artística.
En este texto sólo destacamos que inició sus funciones en 1987. Con el paso del tiempo sufrió altas y bajas en su operación a cargo del ayuntamiento y demás organizadores.
El 3 de marzo de 1962, mediante el Decreto 362, el Gobierno del Estado cedió el teatro Calderón a la institución que hoy es la Universidad Autónoma de Zacatecas, con la finalidad de que se convirtiera en “vínculo permanente en la cultura superior y el pueblo, que encuentre en las manifestaciones artísticas un vehículo vigoroso y pujante de cultura.” (Semanario UAZ Siglo XXI N° 89: 2012).
Bajo la guarda y custodia de la UAZ, su remodelación ha sido toda una hazaña. Su funcionamiento ha transitado de bien a mejor.
La UAZ, tradicionalmente caracterizada por su vocación de tender puentes, estrechar lazos, forjar sinergias, ha colaborado con el Instituto Zacatecano de Cultura en el cumplimiento en su tarea de difundir cultura, como lo evidencia lo siguiente:
En 1987 en coordinación con el Gobierno del Estado se implementó el denominado “Festival: Zacatecas en la Cultura” para que los zacatecanos y visitantes, durante la semana mayor, tuvieran la oportunidad de asistir a eventos recreativos y culturales.
En esos tiempos iniciales, principalmente se utilizó el teatro Calderón para la presentación de conciertos, teatro, danza y otras expresiones artísticas.
El festival mencionado evolucionó. Desde 1993 adoptó el nombre de “Festival Cultural Zacatecas” (FCZ) incrementando su duración. Su prestigio trascendió nacional e internacionalmente.
Treinta años de historia no se pueden resumir tan fácilmente. Por hoy baste decir que en cada FCZ la intervención de académicos, grupos artísticos de la UAZ y de su teatro Calderón, en definitiva el más bello recinto del arte en Zacatecas, han sido protagónicos. En la siguiente entrega se mencionará con más detalle la participación de la UAZ en el 30 FCZ, dedicado a Manuel Felguérez y a Rafael Coronel Arroyo, este último exalumno del Instituto de Ciencias de Zacatecas (UAZ). ■
Así se observa el mundo desde El Mirador de Heródoto.
*Cronista de la UAZ
