El diputado Ernesto González Romo alertó sobre la existencia de “campos de esclavitud” en los municipios de Villanueva y Genaro Codina, en donde grupos criminales obligan a realizar trabajos forzados a personas secuestradas, de los cuales ya entregó información de algunas de las víctimas a la Secretaría de Seguridad Pública.
“Desde hace algunos meses, algunos familiares de las comunidades de Guadalupe se han acercado conmigo para pedir mi ayuda y que las autoridades investiguen lo que serían campos de esclavitud ubicados en la zona de la Sierra Fría, en donde habría víctimas de desaparición forzada”, expuso.
Comentó que no hay certeza de lo que ocurre dentro de estos “campos de esclavitud”, pero se cuenta con testimonios de personas que lograron escapar y que inmediatamente se comunicaron con sus familiares y, posteriormente, salieron del estado y del país para protegerse.
Refirió que toda la información ya fue entregada a diversas instancias del Gobierno del Estado, y aunque no se puede revelar el nombre de las personas que podrían ser víctimas de este delito, hay testimonios y evidencias de la existencia de estos lugares.
González Romo detalló que aparentemente las personas secuestradas son obligadas a realizar trabajos forzados en condiciones infrahumanas, pero es un asunto delicado que debe ser corroborado por las autoridades a través de sus procesos de investigación.
Ante la localización reciente de algunas fosas clandestinas en los municipios de Cuauhtémoc y Genaro Codina, exhortó a las autoridades a que ese hallazgo sea utilizado para investigar la existencia de estos “campos de esclavitud”.
Recordó que en Zacatecas hay antecedentes de estos centros de esclavitud y el caso más reciente fue “el año pasado, cuando, en un operativo exitoso, autoridades de los tres órdenes de gobierno lograron desmantelar uno de estos sitios y lograron el rescate de 15 víctimas de desaparición forzada”.
EN LOS CENTROS APARENTEMENTE
UBICADOS EN LA SIERRA FRÍA,
LAS VÍCTIMAS ESTARÍAN SOMETIDAS
A TRABAJOS EN EMPAQUETADO Y
POSIBLES NARCOLABORATORIOS
En este caso ocurrido en Fresnillo, recordó que había personas que estaban realizando trabajos forzados de albañilería para un grupo del crimen organizado, mientras que, en los centros aparentemente ubicados en la Sierra Fría, las víctimas estarían sometidas a trabajos forzados en el empaquetado y posibles narcolaboratorios.
González Romo reiteró que, de acuerdo con el testimonio de familiares de las víctimas, estos nuevos “campos de esclavitud” estarían localizados entre los municipios de Genaro Codina y Villanueva, en específico en la zona de la Sierra Fría que colinda con el estado de Aguascalientes.
El diputado consideró que ésta es una práctica cada vez más común del crimen organizado, lo que podría obedecer a que, ante los altos índices de violencia, es difícil que el crimen organizado encuentre mano de obra y lo que hace es recurrir a la desaparición forzada y someter a sus víctimas a situaciones de trabajo forzado.
En los “campos de esclavitud” ubicados, precisó que cuenta con el nombre de los familiares, datos de los expedientes y de la averiguación previa, “pero me parece que el hallazgo de estas fosas cercanas a la Sierra Fría habla de un fenómeno delictivo que es cruel y abominable en contra de las personas”.
Manifestó que es un tema muy delicado y se debe ser cuidadoso con la información respecto a estas situaciones, pero en este caso hay información de víctimas concretas y de sus familiares.
González Romo opinó que esta situación debe visibilizarse y atenderse, a fin de que se investigue y se logre el rescate de las víctimas, motivo por el cual hizo el llamado a las autoridades a realizar las acciones necesarias.
“No buscamos politizar, no estamos buscando confrontar con ninguna autoridad ni buscamos ningún tipo de especulación; lo único que buscamos es que las familias se puedan reencontrar y que las personas puedan regresar a sus hogares”, dijo.
Por último, indicó que se desconoce cuántas víctimas de trabajo forzado se encuentran en estos campos, pero en este momento hay denuncias concretas de familias de algunas de las personas que fueron secuestradas, desaparecidas y forzadas a trabajar para los grupos del crimen organizado.
