■ En éste participan los tres niveles de gobierno y empresarios del entretenimiento y turismo
■ “Están generando rentas e ingresos para beneficio privado”: Margarita González Hernández
Durante 30 años, en Zacatecas se ha desarrollado un pacto entre los tres niveles de gobierno y empresarios del entretenimiento y del turismo, a fin de mercantilizar el Centro Histórico y generar ingresos y obtener beneficios privados, afirmó Margarita González Hernández, investigadora de la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).
De esa manera “están generando rentas e ingresos para beneficio privado, cuando en realidad el Centro Histórico es producto no solamente de una construcción colonial, sino producto del esfuerzo de todos los zacatecanos desde que se fundó hasta la fecha”, expuso”.
Es decir, el Centro Histórico es un producto del bien común, pero las ganancias y los excedentes se están privatizando y no se refleja en creación de empleo u otros aspectos que utilizan las autoridades en los discursos, ni en la generación de nuevas actividades, por lo que sólo un pequeño grupo de empresarios es favorecido del turismo.
Durante su ponencia impartida en el seminario “Ciudadanos reconquistando y recuperando el Centro Histórico”, señaló que los procesos políticos y económicos detrás del proyecto turístico tienen que ver con la privatización y mercantilización del patrimonio que también es un bien común.
González Hernández reiteró que el objetivo de los proyectos que se realizan en el Centro Histórico es extraer ganancias para un grupo específico de empresarios que es beneficiado económicamente.
Aunado a ello, hay otros factores que están provocando la expulsión de la población y la expulsión de actividades económicas que no coinciden con el entretenimiento y con el turismo, de manera que los pequeños negocios paulatinamente han salido del Centro Histórico debido a que no tienen cabida en el proyecto.
“Eso tiene como consecuencia el abandono de las viviendas en el Centro Histórico, que además está relacionado con que los dueños de ellas esperan que mejoren el valor de la propiedad para vender a algún hotel o negocio”, expuso.
Indicó que la problemática de la mercantilización del Centro Histórico lleva consigo efectos que impactan directamente en la composición, pues por una parte envejece la población, pero por otra parte llegan nuevos residentes con prácticas y patrones de consumo distintos a los que generalmente había.
González Hernández puntualizó también que el nombramiento de Patrimonio Cultural de la Humanidad no tiene mayor importancia en el proceso de mercantilización, aunque tiene dos incidencias: una es la conversión de esos espacios históricos en negocio, y otra es que ésa y otras etiquetas implican la asignación de recursos públicos.
Respecto al seminario, dijo que el objetivo es generar una discusión abierta entre ciudadanos, agentes económicos, sociales y políticos, a partir de lo cual “dar un primer paso para la ciudadanización del Centro Histórico que está siendo mercantilizado y privatizado”.
Expropiación, una alternativa para atender
problema de viviendas abandonadas: docente
Una alternativa viable para atender el problema de las viviendas o propiedades abandonadas y en peligro de derrumbe, ubicadas en el Centro Histórico, podría ser la expropiación, opinó Daniel Hiernaux Nicolás, profesor de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), durante la ponencia inaugural del seminario “Ciudadanos reconquistando y recuperando el Centro Histórico”, organizado por la Unidad Académica de Estudios del Desarrollo de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ).
Señaló que la expropiación de esos inmuebles, como se ha realizado en el Distrito Federal, es una opción que puede resolver la situación: “hemos dejado muchos instrumentos más duros por la posición más neoliberal que estamos llevando, pero la expropiación sigue siendo algo que debemos usar en estos casos”.
Por otra parte, comentó que este es un momento difícil para la población que reside en barrios del Centro Histórico en diversas ciudades, pues hay intereses económicos a los no puede hacer frente por varios motivos.
“La población está muy indefensa y no todos tienen la capacidad de organizarse, además de que no saben contra qué se organizan. Así, si no tenemos claro el papel de las universidades de ayudar a entender lo que está pasando. Yo creo que primero hay que entender esos procesos”, expuso.
Hiernaux Nicolás manifestó que la Unesco no pide un proyecto de lo que se pretende hacer en un Centro Histórico, sino un plan de manejo, es decir, que todo se realice bajo los preceptos de las fuerzas del mercado, pero con reglas de gestión establecidas.
En ese sentido, dijo que todo proyecto que se desarrolla entorno a una ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad debe reorientarse, porque en lugares como Oaxaca, Ciudad de México o Zacatecas, esa apuesta solamente sirve a “la gente de dinero”.
Expuso que la propuesta patrimonial que hace la Unesco, aun si se mete en lo intangible como la gastronomía, “la están viendo en función del patrimonio que dejan los grupos poderosos”, sin preocuparse por el patrimonio popular.
Entonces manifestó la importancia de proteger el patrimonio en todas sus dimensiones u hacer que el turista no solamente se interese en los museos, sino también en el modo de vida de la población.
“Hay que pensar una opción para que la misma gente sea el patrimonio, no que esté disfrazada con ropa tradicional, sino que demos la posición a la población que reside en los Centros Históricos de mantener sus modos de vida que sí es parte del patrimonio social del país”, precisó Hiernaux Nicolás.
