Fernando Robledo Martínez y Rodolfo García Zamora, investigadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ), así como Ana Saiz Valenzuela, de Sin Fronteras, coincidieron en que las políticas migratorias no favorecen a los migrantes y, por el contrario, acentúan la xenofobia y la discriminación.
Durante el Foro “Retos desde el sur: origen, tránsito y destino”, Fernando Robledo Martínez, docente de la BUAZ, expuso que el número de personas del centro y Sudamérica que fueron deportadas de Estados Unidos, en 2020, fue de 60 mil 415 ciudadanos, mientras que en 2021 fueron 114 mil, y en lo que va de 2022, 56 mil.
También expuso que el gobierno de Donald Trump estableció un techo de 15 mil refugiados para 2021; 18 mil, para 2020, y Joe Biden definió un límite de 125 mil para este año.
Sin embargo, comentó que Estados Unidos ha aceptado a 500 mil ucranianos, cuando el límite establecido fue de 100 mil refugiados provenientes de dicho país, además de aportar un billón de dólares para las economías europeas que reciben a personas desplazadas de Ucrania.
Por su parte, Ana Saiz Valenzuela, de Sin Fronteras, afirmó que las políticas migratorias en México van en contra del sentido común y están basadas en el miedo, la xenofobia y la discriminación.
“En España o Francia
el 14% de su
población es extranjera
y en México no
llegamos al 1%”
“De otra manera, esas políticas no tienen sentido. Las personas buscan otro tipo de empleos que se necesitan en México y grandes corporaciones los buscan. Tenemos una gran inversión que podemos hacer en todo ese capital humano y no sería un gran número de población porque en España o Francia el 14 por ciento de su población es extranjera y en México no llegamos al 1 por ciento”, expuso.
Explicó que las caravanas migrantes salen de Tapachula debido a que durante meses no les han resuelto trámites a los que tienen derecho, de forma que es una cuestión de derechos humanos.
“Tener certeza en el Estado de Derecho no nada más conviene a los migrantes, nos conviene a todos porque así se hace la paz social y porque así se puede hacer el progreso”, agregó Saiz Valenzuela.
Asimismo, Rodolfo García Zamora, investigador en Estudios del Desarrollo de la BUAZ, manifestó que México no sólo es un país que expulsa migrantes, sino que también es de tránsito, de destino, de retorno, de refugio, de asilo y de devueltos.
Desde su perspectiva, este problema se ha acrecentado debido a que “no hay voluntad política de toda la clase política nacional, de todos los partidos políticos, de recuperar una gran propuesta integral de desarrollo, migración y derechos humanos”.
