CIUDAD DE MÉXICO. Como parte de la Estrategia Nacional del Sector de Hidrocarburos y Gas Natural, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo anunció la creación del nuevo régimen fiscal para Petróleos Mexicanos (Pemex): Derecho Petrolero para el Bienestar, que será de 30 por ciento para el petróleo y del 11.63 por ciento para gas no asociado, para el bienestar de las y los mexicanos.
Explicó que este nuevo régimen se incluirá en el Paquete Económico 2025 y será fortalecido con las leyes secundarias de la reforma constitucional en materia energética que serán presentadas en febrero del próximo año, en las que también se incluye el Plan de Austeridad Republicana para Pemex con el que se estima el ahorro de 50 mil millones de pesos.
Asimismo, puntualizó que se implementarán proyectos mixtos sin perder la soberanía energética en producción de hidrocarburos, fertilizantes y para el fortalecimiento de la industria petroquímica, contrario a lo que sucedía en el periodo neoliberal en el que los contratos beneficiaban únicamente al sector privado y en el que se adquirió una deuda que continúa pagándose.
Finalmente, puntualizó que el Plan de Austeridad no representa ninguna afectación a quienes laboran en Pemex.
La secretaria de Energía, Luz Elena González Escobar, detalló que se mantendrá una relación de reservas respecto a la producción de hidrocarburos de por lo menos 10 años; se aumentará la producción nacional de petroquímicos para suministrar a la industria nacional y fertilizantes para la producción de alimentos; se consolidará la refinación de petróleo para lograr la autosuficiencia nacional en gasolinas y diésel; se desarrollará un marco normativo para impulsar los biocombustibles y combustibles limpios; se aumentará la capacidad de almacenamiento de gasolinas, diésel y gas para fortalecer la seguridad energética y se apoyará a Pemex para aprovechar de manera más eficiente sus recursos y mejorar su capacidad operativa.
Puntualizó que en apoyo a la economía de los hogares mexicanos no se aumentará en términos reales el precio de los energéticos en los próximos seis años; se mantendrá control en el precio máximo del gas LP, y el precio de las gasolinas y el diésel no se incrementará por encima de la inflación. Aseguró que no se realizarán proyectos al margen de las comunidades indígenas; se verificará que haya trabajo social y se realizarán consultas públicas para garantizar beneficios sociales a las comunidades.
Cabe destacar que, de acuerdo con la Enciclopedia Económica, “Cuando se habla en términos reales, se refiere a precios del año base. Es decir, se fija un año determinado como referencia y se toman los precios del año base de los productos a estudiar. De esta forma se excluye en los estudios el efecto de la inflación. El proceso para convertir un valor nominal a términos reales se denomina precisamente ajuste por inflación. Y gracias a este ajuste, los valores reales son una excelente medida del poder adquisitivo neto, sin importar los cambios de precios a lo largo del tiempo.
Al hablar en términos nominales, por el contrario, el valor de los productos es en precios actuales, es decir, teniendo en cuenta los precios que hay en el momento del estudio en el mercado, por lo que incluimos la inflación o pérdida de capacidad de compra de la moneda”.