■ Coinciden funcionarios en que datos sobre mujeres permiten diseñar las políticas públicas
■ “La agenda en esta materia va más allá de los intereses de partidos o particulares”: Olamendi
Durante el segundo Foro de la Agenda para la consolidación de los Derechos Humanos de las Mujeres y la Igualdad Sustantiva, especialistas en la materia expusieron, desde sus perspectivas, la dirección en la que deben avanzar los planes de desarrollo a fin de lograr la equidad y paridad total en los municipios, estados y país.
Patricia Olamendi Torres, activista, autora feminista y consultora de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en materia de equidad, dio inicio explicando que la agenda de género trastoca todo el tema partidario, es decir, va más allá de los intereses de partidos políticos o intereses específicos.
Debido a su intención de llegar a la población en general, en primera instancia se debe “transformar el orden legal existente, construido por el patriarcado”, por uno que considera las necesidades de las mujeres; esto ya se ha hecho, por lo que el siguiente paso a dar es “transformar en los hechos la realidad de las mujeres”.
La especialista aseguró que “hemos avanzado en muchos terrenos, pero es necesario reconocer que no es el caso en otros”, considerando que el programa de derechos para las mujeres “no se ha materializado”.
Así pues, la Ley de planeación que pone como objetivo la igualdad exige la perspectiva de género y sirve como guía para construirlo pero se queda en el papel y no llega a la acción; aunque en Zacatecas haya un “avance normativo”, éste “no se refleja como una mejoría” de salud, empleo, educación o acceso a la justicia.
Como ejemplos destacó la apuesta “3 de 3” en paridad de género, argumentando que no es un proceso directo el acceso a la pensión alimenticia y en realidad no hay un padrón de deudores que se pueda consultar; asimismo, se ha legislado la violencia sexual, pero existe un “laguna legal” que ha “desatado violencia y embarazos en las niñas de entre 12 y 18 años”, y que también han resultado en crecimiento de la explotación sexual.
En este sentido, Olamendi afirmó que la agenda política debe centrarse en la protección a las niñas, “asegurando un futuro mejor”.
Además, en el marco de la pandemia, se debe considerar “el recuento de daños que será enorme”, y que si no se tiene en cuenta llevarán a un retroceso la educación, salud materna, reproductiva y empleo “que puede conducir a la situación de las mujeres en los años 70-80”, es decir, “la brecha de género que se va a ampliar” debido a la pandemia.
El reto, entonces, será, a pesar de las circunstancias, lograr la paridad total “en reglamentos, leyes orgánicas, en puntos y comas, o sólo habrá paridad electoral”, condenó la consejera, cuando lo que se busca es la igualdad de oportunidades.
Como parte de su discurso, arremetió contra un gobierno federal que limita la libertad de expresión, por lo que aseguró que como feministas se debe seguir insistiendo en la agenda feminista, “ningún violador será gobernador, y ningún agresor debe estar en el poder”.
Por su parte, Ana Hilda Rivera Vázquez, subsecretaria de la Secretaría de las Mujeres (Semujer), declaró que cada plan municipal de desarrollo debe proteger la perspectiva de género, sustentado por tratados internacionales, a fin de erradicar la discriminación de las mujeres y promover el adelanto de las mismas.
Asimismo, sostuvo que las políticas deben ser implementadas desde el análisis de datos con perspectivas de género, que a su vez permitan la evaluación y diseño de políticas públicas.
Cabe señalar que la planeación también se debe dar con perspectiva de género y multiculturalidad, es decir en igualdad de derechos; y su aplicación debe coadyuvar con los 3 poderes de gobierno.
Rivera reiteró que es indispensable tener un análisis de género, no sólo desagregar los datos por sexo; se tendría que verificar la participación de las mujeres en los distintos espacios y reconocer que tiene necesidades diferentes de acuerdo con los roles que realizan.
El análisis, puntualizó, debe ir más allá de lo comparativo y centrarse en por qué suceden las desigualdades, no sólo repetir que existe la brecha de género. Del mismo modo, debe ser municipal porque “no es lo mismo que sucede en Tepetongo que en Susticacán”.
Sin datos estadísticos es difícil generar políticas públicas con perspectiva de género “y mucho menos se atenderán las necesidades de hombres y mujeres”, aseveró. Esta información se debe incorporar en todas las materias de la administración.
Durante su participación, Amalia García Medina, ex gobernadora del estado, insistió en que es fundamental que se reconozca que el trabajo no remunerado, “tiene un valor”, aseguró, y por lo tanto, en su opinión, debería reconocerse. Además, concluyó que “se deben garantizar derechos efectivos, no sólo en la letra”.
