En la actualidad, con el avance del ciberdelito, ya no solo pensamos en la seguridad y protección de la computadora y el smartphone, ya sea en el ámbito hogareño o laboral. Hoy, todos los dispositivos conectados a internet corren el riesgo de ser atacados o hackeados, y es responsabilidad de cada usuario mantenerlos protegidos.
Uno de los dispositivos que no solemos tener en cuenta si pensamos en ciberdelitos es el smart tv que constantemente está conectado a la red de internet. Y si bien las empresas desarrolladoras de estos equipamientos los hacen con tecnologías cada vez más modernas, lo cierto es que con el avance del IoT, este puede ser un punto vulnerable.
Solo en el 2021 fueron más de 25.000 los dispositivos conectados a IoT. Entre ellos, la mayoría, smart tv. Esto significa que todos los ciudadanos están expuestos a ser atacados por un espía o, sin querer, cometer un error en línea que los lleve a caer en las trampas de los ciberdelincuentes.
¿Por qué sumar una cuota extra de seguridad al smart tv?
Este dispositivo puede ser un punto de entrada para acceder al resto de los aparatos conectados a la misma red, por lo que es muy importante protegerlo. A su vez, muchas personas tienen activas sus cuentas de Netflix, HBO o Disney Plus en estas pantallas por lo que, desde allí, un ciberdelincuente podría acceder fácilmente a tus datos personales o la información confidencial de la tarjeta con la que abonas la suscripción mes a mes.
La recomendación de los especialistas es tener siempre actualizado el sistema operativo para garantizar la seguridad propia que el dispositivo ofrece ya que, con cada upgrade, estos software se vuelven más fuertes y robustos para defenderse de posibles ataques.
En segundo lugar, una red virtual privada o VPN para smart tv es una gran herramienta que garantizará la seguridad de la conexión. Con ella, el usuario puede ocultar su actividad y permanecer protegido de ataques, espías o hackeos mediante un cifrado de datos e información. A su vez, muchas de las empresas proveedoras de esta solución ofrecen bloqueo de anuncios o publicidad incluído en sus ofertas.
Como función adicional, con una VPN activa, el usuario puede cambiar su dirección IP y así acceder a contenidos bloqueados geográficamente por plataformas como Netflix o Amazon Prime. Estas empresas, por cuestiones de permisos de emisión, pueden no mostrar toda su cartilla en todos los países. La VPN, como permite cambiar de servidor y, en consecuencia, de dirección IP, habilita la oferta de todos estos contenidos independientemente de donde el usuario esté físicamente.
Finalmente, siempre es bueno revisar los permisos y ajustes de privacidad. Según los expertos, dentro de la configuración, cada usuario debe chequear los permisos concedidos a aplicaciones, plataformas y/o sitios y quitar los permisos que ya no se utilicen o no correspondan a APP vigentes.
A su vez, dentro de ajustes “ajustes de privacidad” la persona que utiliza el dispositivo podrá limitar lo que se comparte desde el smart tv y, a su vez, quienes pueden contarse directamente a él. En último lugar, es muy importante revisar que esté activo el firewall que trae el propio sistema operativo ya que esta funcionalidad, también llamada cortafuegos, es el primero punto de defensa del dispositivo. Este es otro modo de garantizar la seguridad.
Por fuera del televisor en sí, el usuario deberá chequear la seguridad del router. En ese caso, la VPN también podría colocarse allí para proteger todos los dispositivos al mismo tiempo. También, de forma regular, será fundamental revisar la conexión y los aparatos que se conecten a ella.
