Este jueves se reanudaron las mesas de diálogo temáticas entre la Rectoría de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ) y el Sindicato de Personal Académico (SPAUAZ), pero no se llegó a ningún acuerdo para atender la demanda de convocatorias para cambios de categoría y basificación.
Para esta mesa de trabajo la Rectoría solicitó abordar el tema de las cargas de trabajo, pero la representante del Centro de Conciliación Laboral les notificó que había una mesa de trabajo abierta que debía ser concluida o bien suspendida para abordar otro tópico.
La secretaria general Jenny González Arenas señaló que de su parte no había la intención de suspender la mesa de diálogo y propuso continuar con la temática de cambios de categoría, incrementos y basificaciones y para ello solicitó respeto a los procedimientos establecidos en el Contrato Colectivo de Trabajo
En respuesta, José Juan Martínez Pardo, ex dirigente sindical, comentó en representación de la Rectoría que, para que haya cambios de categoría, se requiere de una partida presupuestal asignada, pero la federación solo reconoce juna cantidad determinada de plazas en la universidad y entonces hay esa limitante para realizar ese proceso.
Por tanto, indicó que el compromiso de las instituciones es hacer las gestiones necesarias para el reconocimiento de plazas y a partir de la autorización del gobierno federal, se publicarían las convocatorias correspondientes.
González Arenas reiteró que hay muchos movimientos irregulares en la nómina que tienen que ver con cambios de categoría, lo que significa que sí hay presupuesto, pero en este caso lo que ocurre es que no hay voluntad para que esos cambios se otorguen conforme a derecho y con base en lo establecido en el Contrato Colectivo de Trabajo.
Es decir, señaló que, si el derecho al cambio de adscripción se aplica a algunas personas, entonces significa que también puede aplicarse a los demás y para ello es necesario apegarse a los procedimientos establecidos en el contrato.
Además, denunció que directores de varias unidades académicas han realizado llamadas telefónicas a los docentes y les ha advertido que si siguen participando en las mesas de diálogo “se atengan a las consecuencias y que su carga se va a ver afectada”, por lo que exigió a la administración central a que no amedrenten ni presionen a los profesores.
Martínez Pardo deslindó a los funcionarios universitarios de cualquier tipo de presión en contra de los docentes, puesto que “no es el actuar de esta administración y respetamos la decisión de los agremiados”.
Reiteró que la única propuesta de la Rectoría es realizar la gestión ante instancias federales para que la federación avale y reconozca las plazas que les permitan la emisión de convocatorias para cambios de adscripción.
La secretaria general del SPAUAZ manifestó que esa no era una propuesta, sino discurso demagógico, pues insistió en que hay cambios de categoría que la Rectoría ha realizado sin que se tomara en cuenta ese argumento de falta de recursos, por lo que exigió que se realicen dos procedimientos al año y que se definan las fechas, porque lo demás “es una justificación irracional debido a que sí hay cambios de categoría para amigos y familiares”.
La reunión concluyó sin que hubiese acuerdos, pero este viernes se llevará a cabo una segunda audiencia en el Tribunal Laboral, en la que la Rectoría presentará la misma propuesta de gestionar ante la federación el reconocimiento presupuestal de más plazas.
No obstante, Ángel Román Gutiérrez, secretario general de la BUAZ, consideró que en las reuniones de negociación ha habido avances favorables e incluso de parte de la administración central ya hay una propuesta económica que el sindicato no ha respondido, al igual que en el tema de las cargas de trabajo.
