De acuerdo con el último Informe sobre la situación del alcohol y la salud en la Región de las Américas 2021, publicado hace unos días por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el consumo nocivo de alcohol persiste como un problema delicado en la región, pues, aunque el número de bebedores no ha acusado cambios significativos, en los últimos años la tasa de consumo excesivo episódico aumentó 12 por ciento, se informó en un comunicado.
“Esto significa que los bebedores actuales están consumiendo más o de manera irresponsable, lo que queda de manifiesto con el aumento del consumo de alcohol per cápita en los bebedores, que pasó de 14.7 litros a 15.1 litros de alcohol puro”, registra el documento de la máxima institución en salud del mundo. En ese sentido, se advierten los efectos negativos que dicha situación provoca en la sociedad y en la salud de las personas.
Por ejemplo, apunta el informe, en 2016 el alcohol fue la causa de más de 379 mil muertes, lo que equivale a una pérdida humana cada 100 segundos. Entre las muertes atribuidas al consumo nocivo se encuentran diferentes tipos de cánceres, la autoagresión y violencia interpersonal, así como los trastornos digestivos. “El alcohol tiene una relación causal con más de 200 enfermedades y códigos de lesiones”.
Es por ello que desde hace poco más de una década, el organismo internacional se ha planteado una serie de objetivos y metas con relación al consumo del alcohol, promoviendo estrategias y políticas que han demostrado ser eficaces en su tarea preventiva. En concordancia con estos mismos planteamientos, desde su creación, la Fundación AB InBev adoptó como propios los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, y la compañía de la cual forma parte AB InBEv, hizo el compromiso sin precedentes para invertir recursos propios en la promoción de un consumo responsable.
En este marco se creó el proyecto Ciudades Piloto, donde participan cinco ciudades del mundo, entre las que se encuentra Zacatecas, las cuales funcionan como laboratorios para probar y evaluar el impacto de diferentes iniciativas que en conjunto tienen el propósito de disminuir en al menos un 10 por ciento el uso nocivo del alcohol.
En Zacatecas Ciudad Piloto estamos trabajando en 4 ejes fundamentales: el cero consumo de alcohol entre menores; no al consumo explosivo de alcohol; seguridad vial y la no violencia relacionada con el alcohol, informó Elena Cárdenas Vargas, representante en el estado de la Fundación AB InBev.
Explicó que, en materia de seguridad vial, desde 2016 se han llevado diversas actividades en coordinación con la Secretaría de Seguridad Pública y la Dirección de Policía de Seguridad Vial. Se creó la campaña El alcoholímetro salva vidas, programa que ha reducido las muertes y accidentes relacionadas con alcohol. Cabe destacar que esta acción camina de la mano con una de las estrategias que recomienda la OMS, que es la de instalar puestos de control de tránsito para hacer cumplir las leyes sobre la conducción bajo los efectos del alcohol.
Además, en armonía con el organismo sanitario, Fundación AB InBev con aliados clave ha puesto en marcha programas como Intervención Breve Basadas en Entrevista Motivacional (IBEM), Escalemos y el más recientemente, Desafío Responsable; todos dirigidos a diferentes sectores de la población zacatecana, pero con un fin común: la prevención de los daños que ocasiona el uso nocivo del alcohol.
