Representantes de la asociación de madres y padres de familia de la escuela primaria Benito Juárez piden se aclare un monto faltante de 61 mil pesos en la tarjeta que les fue entregada por parte de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) en el estado, para cubrir el pago de 715 uniformes escolares.
Mario Eduardo Márquez Ibarra, presidente del comité de padres de familia del turno matutino, explicó que en noviembre de 2024 se les entregó una tarjeta para la compra de los uniformes, con un apoyo de 500 pesos por alumno, sumando una cantidad de 375 mil 500 pesos, cantidad que supuestamente estaría depositada en su totalidad.
Sin embargo, los padres de familia no tenían forma de verificar el saldo exacto en la tarjeta y fue al intentar liquidar el pago la semana pasada que se percataron de los 61 mil pesos faltantes, lo que les impidió cumplir con el compromiso de entrega de los uniformes a los alumnos. Por ello, solicitan a las autoridades responsables del Programa de Educación para el Bienestar que se aclare el monto faltante y se deslinden responsabilidades del comité de padres de familia.
Advierten que, de no resolverse esta situación, el proveedor de los uniformes podría tomar acciones legales por incumplimiento de pago.
Anabel Ávila Medécigo, secretaria del comité de uniformes y de la Asociación de Padres de Familia, detalló que han tenido conocimiento de que esta irregularidad se ha presentado en todo el estado, en las escuelas que han sido beneficiadas con este programa. En otras escuelas, al tener una matrícula menor, las cantidades faltantes son menos cuantiosas, pero igualmente significativas, ya que afectan la entrega de uniformes y generan inquietudes sobre el destino de los recursos faltantes, explicó.
Indicó que a la fecha no ha tenido respuesta el oficio que dirigieron con este motivo a Arturo González Patiño, director de Apoyos Educativos para el Bienestar.
Márquez Ibarra señaló que el año pasado no tuvieron ningún problema con este programa y que incluso fueron de las primeras escuelas en recibir los uniformes al haber ejercido correctamente el recurso.