■ Denuncian que directivos han impedido creación de sindicato; solicitan se respeten derechos
■ Dependencia afirma que el contrato civil no establece ni la obliga a proporcionar Seguridad Social
Trabajadores del Instituto Zacatecano para la Educación de los Adultos (IZEA) informaron que continuarán con su manifestación en esa dependencia hasta que se garantice su ingreso al régimen de Seguridad Social, puesto que durante años no han sido beneficiarios de ninguna prestación.
Además, denunciaron que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) ha impedido la creación formal del Sindicato Único de Trabajadores (Sutizea), e incluso se evitó la recontratación de dos personas que impulsaban la conformación de ese gremio.
Mario Alberto Rosas Roque, uno de los trabajadores inconformes, aseguró que la no renovación del contrato de esas personas fue por “pertenecer a este movimiento de la creación del sindicato. Por eso estamos en apoyo solidario, manifestándonos para que sean reinstalados”.
Respecto a la conformación del sindicato, denunció que no se les ha otorgado la toma de nota debido a que hay “injerencia de autoridades del Gobierno del Estado”, pero mientras tanto continúan solicitando que se respeten los derechos laborales y que no haya ninguna represalia a quienes realizan la protesta que se mantendrá hasta este jueves.
“No buscamos otro objetivo más que el reconocimiento de nuestros derechos laborales. No es nada que no nos corresponda por ley y por eso estamos formando un sindicato con gente que tenemos desde 14 años con las mismas condiciones, sin ninguna prestación y cada tres meses hacen contratos por honorarios para evitar la relación laboral”, expresó.
Sin embargo, Rosas Roque afirmó que la relación laboral está acreditada debido a que todo ese personal labora en oficina en horarios determinados, y tienen bienes a su resguardo, entre otras cosas, por lo cual “solicitamos que se nos respeten esos derechos y se nos dé la Seguridad Social”.
A través de un comunicado, Aída Barbosa Galavíz, jefa del Área Jurídica del IZEA, informó que los inconformes son un grupo de personas que prestan sus servicios profesionales a ese instituto por honorarios a través de un contrato civil; así como figuras solidarias gratificadas por el Patronato Pro Educación de los Adultos AC.
Explicó que ellos firmaron un contrato civil por tiempo determinado, en el que aceptaron que el IZEA sólo está obligado a pagar el honorario y efectuar las retenciones de ley (ISR), así como a aprobar los recursos materiales y financieros que requiere el prestador para el cumplimiento de sus servicios.
Incluso, afirmó que las cláusulas del contrato civil no establecen ni obligan al IZEA a proporcionar Seguridad Social a los prestadores de servicios, en virtud de que su situación contractual es por tiempo determinado; lo cual no contraviene ninguna ley.
En lo que se refiere a las personas que fungen como figuras solidarias (asesores educativos, promotores de plazas comunitarias), refirió que éstas reciben una gratificación económica por parte del Patronato Pro Educación de los Adultos AC.
