La visita del Presidente López Obrador a Zacatecas en compañía de todo el gabinete, desató diversos comentarios, críticas y posturas de columnistas, periodistas e incluso entre la clase política, incluso criticas y posturas encontradas por parte del presidente municipal de Fresnillo, quien criticó el no haber considerado a Fresnillo como cede del encuentro con el ejecutivo federal, tratándose de tema de seguridad cuando el muncipio que encabeza el edil, es uno de los municpios más inseguros en el país.
Por otra parte, algunas otras opiniones centraron en el poco respaldo que realmente se mostró por parte de la federación al Estado, el tema de inseguridad es algo que rebasa a los muncipios y en algunos casos también al gobierno estatal, se requiere la colaboración y participacíón del gobierno federal, pues en los muncipios no se cuenta con herramientas necesarias para ello, muchas veces ni siquiera se cuenta con elementos de policía municipal, como es el caso de más de un municipio en el Estado, por ello la presencia de elementos federales como el ejército y la guardia nacional son necesarias.
En este sentido, el gobierno federal expresó su interés por apoyar al gobierno de Zacatecas para salir de la crisis de inseguridad que atraviesa el Estado, sin embargo, en otros aspectos, nos encontramos con un informe de los programas sociales y recursos que a través de estos, han sido destinados para beneficio de nuestro estado y de los zacatecanos y que serguirán siendo destinados para salir de diversas crisis, sin embargo, el mensaje de fondo realmente fue que a Zacatecas le toca salir de la crisis que se vive, consecuencia de nuestra clase política que incluso forma parte de la nueva administración.
No fue anunciado el incremento en el recruso que ya fue aprobado por el Congreso Federal, no se anunciaron obras trascendentales para el estado, sino que se deja la tarea para que la nueva gobernanza implemente las estrategias y políticas necesarias para incrementar la recaudación, sanear las finanzas públicas y de la misma forma, buscar impulsar el desarrollo del estado a través de programas sociales que no sean recibidos por la federación.
En este sentido, le tocará al Gobernador de Zacatecas, sanear las finanzas del Estado y pedir a los demás poderes y niveles de gobierno que implementen las acciones propias para ello, evitar el derroche y excesos de los representantes populares y encargados de otros poderes como el judicial, cuestión que hasta el momento no hemos podido atestiguar, ni siquiera el interés de ello, pues por un lado, ningún municipio ha anunciado medidas drásticas para disminuir el gasto en nómina o para eliminar los beneficios de regidores y presidentes municipales; el Congreso del Estado se rehúsa a hacer lo propio, incluso legisladores del PT han presentado iniciativas para recuperar los 72 millones de pesos que recibían como herramientas legislativas así como el hecho de negarse a nombrar al titular del órgano interno de contro, es decir, no existe revisión al interior de dicho poder; y el poder judicial ha sido incapaz de transparentar los millones de pesos que la auditoría superior del estado, señaló de no haber sido comprobados debidamente.
Es evidente que el Presidente López Obrador busca obligar a los gobiernos de los Estados para que implementen, a nivel local, estrategias que el gobierno federal ha impulsado para sanear las finanzas públicas, no habrá recursos para cubrir las obligaciones de los gobiernos estatales, al menos no para cuestiones como las nóminas o pago de deudas, deberán ser cubiertas y resueltas por los mismos, contrario a lo que se creía y se presumía si los candidatos de la cuarta transormaición obteniían la confianza de los electores.
Zacatecas, más allá de requerir de mucha imaginación, necesitará de mucha voluntad política, los Legisladores locales deberán renunciar a los 72 millones de pesos que sus antecesores comprobaban con facturas falsas, así como reducir sus percepciones, los lujos de los funcionarios del Congreso e intelegirle al momento de la aprobación del paquete económico; el gobierno del estado por otro lado, deberá reducir y eliminar las bolsas de recurso destinado al despilfarro, programas electoreros y evitar fugas de recurso.
De la visita del Presidente es claro que la inteligencia del gobierno estatal será clave, pero la voluntad será determinante para que nuestro Estado salga del bache en el que se encuentra, la idea de esperar a que el gobierno federal nos rescate debe verse como algo imposible, la voluntad de los presidentes municipales, legisladores y demás poderes en el Estado, debe convertirse en una exigencia de los ciudadanos.
