Washington. El papa Francisco pidió este miércoles a los obispos estadunidenses que trabajen para que los casos de abuso sexual de niños que sacudieron a la Iglesia Católica no se repitan.
«Sé cuánto les ha hecho sufrir la herida de los últimos años, y he seguido de cerca su generoso esfuerzo por curar a las víctimas, consciente de que, cuando curamos, también somos curados, y por seguir trabajando para que esos crímenes no se repitan nunca más», dijo el pontífice argentino durante una sesión de oración con los prelados en una iglesia de Washington.