Tras seis años de abandono, los edificios que albergaron oficinas del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (Issste) han sido blanco de todo tipo de saqueos, que van desde mobiliario y equipos, hasta conexiones intramuros.
Vecinos y trabajadores de oficinas aledañas al inmueble, localizado en la esquina de Paseo de la Reforma y Plaza de la República, en la colonia Tabacalera, alcaldía Cuauhtémoc, señalaron que, en los meses recientes, las torres de 15 pisos han sido ocupadas por varios grupos, como Los Vaga, jóvenes que buscan espacios para concentrarse y realizar pintas.
También han detectado bandas de delincuentes que por las noches han sacado mobiliario, y otros grupos delictivos que se han apoderado del cableado eléctrico. En febrero pasado, policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana detuvieron a un hombre que salía del edificio por Plaza de la República con cinco kilos de cable de cobre.
Ante la presencia de diversos grupos, las autoridades señalaron que el incendio que consumió el sexto piso de una de las torres fue provocado.
El inmueble fue edificado en terrenos de la Lotería Nacional, el cual durante los sismos del 19 de septiembre de 1985 fue severamente afectado, y en el terremoto de 2017 prácticamente quedó inhabitable, debido a que las estructuras ponían en riesgo a los trabajadores, por lo cual las torres de oficinas administrativas y de turismo del Issste fueron desalojadas.
En 2020 se informó que el inmueble pasó a Banobras; sin embargo, el personal de vigilancia que se encuentra en las torres desconoce a qué dependencia pertenece, pero es seguro que es del gobierno, por eso lo tienen tan abandonado
, comentó un guardia asignado para su resguardo.
Vigilancia insuficiente
Ante lo extenso del terreno y el conjunto de edificios, que llegan hasta el Monumento a la Revolución y colinda con grandes inmuebles, como el hotel Meridién, los cinco policías asignados a la vigilancia son insuficientes para evitar el ingreso de personas, muchas en situación de calle.
Además, en algunos edificios se hicieron trabajos de demolición y los huecos abiertos que dejaron es por donde entran para llevarse lo que hay en las oficinas.
Además, sobre Paseo de la Reforma, donde estaban las oficinas de Turissste, rompieron una reja y durante el día, cuando hay vigilancia, evitan que personas extrañas ingresen, pero cuando se hace el cambio de turno ingresan los que viven en situación de calle.
Desde ayer se esperaba la llegada de los peritos para hacer las valoraciones y seguir con los trabajos de demolición de los edificios, luego del incendio que ocurrió la tarde del miércoles en el sexto piso y que consumió diversos materiales.
