Orgullosamente formamos parte de la sección 265 del sindicato nacional de trabajadores mineros que encabeza el senador Napoleón Gómez Urrutia, de quien hemos recibimos todo el respaldo.
Tenemos ya 27 semanas sin salario, nos quitaron nuestro fondo de ahorro, el aún dueño de la empresa, Alonso Ancira, nos cortó los servicios básicos como energía eléctrica y agua potable y en consecuencia las escuelas de primaria, secundaria y preparatoria han tenido que suspender las clases. El hospital de la comunidad cuenta con un solo médico y no tiene fármacos. Personas de la tercera edad que requieren medicinas para tratamientos de Cohadiabetes e a hipertensión están en riesgo. La mina es la única fuente de trabajo para el pueblo de Hércules, que está en la región desértica de Coahuila, y la ciudad más cercana queda a 160 kilómetros y es camino de terracería.
A la fecha ni la autoridad municipal ni el gobernador del estado han escuchado nuestras peticiones; al contrario, hemos recibido amenazas de agresiones de la policía estatal, sólo por demandar de manera pacífica lo que nos corresponde.
Señor Presidente: usted siempre se ha preocupado por los trabajadores y por eso le pedimos que intervenga. No queremos que la mina cierre, ni que nuestro pueblo de Hércules desaparezca.
Necesitamos que la empresa nos pague lo que nos adeuda. El comité representante de los trabajadores mineros:
Abraham Regino Garcia, Roberto Hernández Arrellin y Norberto Monreal Gutiérrez
