Con el objetivo de dar a conocer el estado de las policías municipales y las finanzas de los 17 ayuntamientos con mayor incidencia delictiva o riesgos de seguridad, se llevó a cabo este martes la Mesa Estatal de Construcción de Paz en el Auditorio de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJEZ), presidida por el gobernador David Monreal.
Al evento fueron invitados los alcaldes y alcaldesas entrantes de Zacatecas, Guadalupe, Fresnillo, Jerez, Pinos, Villanueva, Sombrerete, Río Grande, Valparaíso, Monte Escobedo, Nochistlán, Loreto, Villa García, Villa Hidalgo, Ojocaliente, Tlaltenango y Calera.
Rodrigo Reyes Mugüerza, secretario de Gobierno, señaló que algunos municipios no han cumplido con su responsabilidad de pagar salarios dignos a los policías municipales y en depurar a sus cuerpos policiacos.
“Sigue habiendo policías municipales que no tienen los controles de confianza necesarios y (…) hay que decirlo abiertamente, que están probablemente vinculados a la delincuencia organizada», señaló.
Por su parte, el fiscal Cristian Paul Camacho Osnaya exhortó a los alcaldes a que asuman la responsabilidad de utilizar los recursos públicos conforme a la ley, recordó que en el pasado recibió denuncias de peculado relacionadas con presidentes municipales y advirtió que estos delitos no serán tolerados por la FGJEZ.
Criticó la falta de acción en varias demarcaciones, mencionando que «30 municipios no han realizado una sola puesta a disposición en todo el 2024», lo que llevó a cuestionar si realmente no existen delitos como robos o daños en estos lugares.
El fiscal también reconoció a Zacatecas como modelo de actuación eficaz al representar más del 50 por ciento de la efectividad en detenciones, a pesar de contar con menos recursos que otros municipios. Además, la capital y Fresnillo fueron destacados por el gobernador como aquellos con las finanzas más sanas.
Diagnóstico sobre policías municipales
Arturo Medina Mayoral, secretario de Seguridad Pública, destacó un déficit crítico en policías municipales y el rezago en profesionalización que se expresa en la falta de Certificado Único Policial (CUP).
Muchos elementos no han pasado el examen de confianza ni cuentan con el CUP, lo que les impide portar armas. Destacó que los cursos de capacitación son gratuitos, pero algunos municipios no están enviando a su personal.
Fresnillo, que debería contar con 433 policías, actualmente tiene solo 58, lo que representa un déficit de 375. Esto ha obligado al gobierno federal y estatal a mantener una fuerte presencia militar, indicó Medina Mayoral.
Además de enfrentar un grave déficit de personal, con solo 34 policías de los 82 que debería tener, Calera conjuga a los carteles del Noreste, de Jalisco y del Pacífico, pues “todos quieren estar ahí para de ahí salir a operar”, por lo que en este territorio más de mil elementos del Ejército y la Guardia Nacional han sido desplegados.
En este municipio, el C4 solía operar durante solo una hora al día, ya que su director cerraba el Centro después de una hora de trabajo, de las 10 a las 11 de la mañana.
Sobre Villa Hidalgo, Medina Mayoral señaló la infiltración del crimen organizado en la policía local, la cual fue desarmada, ya que no contaban con la evaluación de confianza ni credenciales activas, lo que los hacía vulnerables a la delincuencia.
En Loreto se tienen 12 policías de los 97 necesarios, además no tiene patrullas en funcionamiento, contando solo con una ambulancia y tres motos.
Municipios endeudados
Ricardo Olivares, secretario de Finanzas, señaló que más de la mitad de los ayuntamientos del estado presentan focos rojos en sus finanzas, con un total de mil 322.8 millones de pesos en adeudos; advirtió que muchos municipios han sido embargados por estas deudas, afectando sus cuentas y participaciones, lo que complica su operatividad.
Sombrerete tiene deudas que equivalen a casi dos años y medio de su presupuesto solo para liquidar adeudos, principalmente con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), impuestos sobre la renta y laudos laborales.
El secretario criticó que muchos municipios están utilizando los fondos del Fortamun (Fondo de Aportaciones para el Fortalecimiento de los Municipios) para cubrir otros conceptos, como pasivos, en lugar de destinarlos al tema prioritario de seguridad, tal como lo exige la ley.
Algunos como Pinos, Valparaíso, Villagarcía y Luis Moya ya enfrentan dificultades incluso para pagar las nóminas. Estos municipios se encuentran en una situación de alto riesgo financiero, indicó Olivares, por lo que deben buscar soluciones para evitar un colapso en operaciones.
El titular de Sefin también emitió algunas recomendaciones y advirtió entre otras cuestiones, que el ISR retenido a los trabajadores debe ser pagado oportunamente.
Señaló que entre 8 y 12 demarcaciones están viendo retenidas sus participaciones debido a la falta de pago de este impuesto. Los ayuntamientos que no regularicen su situación enfrentarán retenciones automáticas por parte del Servicio de Administración Tributaria (SAT), indicó.
Alcaldes lamentan las deudas heredadas
Ramiro Hinojoza Aguayo, alcalde entrante de Sombrerete, condenó la irresponsabilidad financiera y en seguridad pública de las administraciones anteriores, describió que el municipio solo cuenta con cuatro patrullas operativas en la actualidad.
El alcalde de Tlaltenango, Francisco Delgado Miramontes, denunció un fraude cometido durante la administración del panista Miguel Varela Pinedo, en el cual, dijo, más de 500 familias fueron afectadas al pagar entre 50 y 60 mil pesos por terrenos que les serían enajenados al municipio, sin que ese dinero ingresara a la Tesorería.
Además, lamentó la existencia de una deuda de 10 millones de pesos, un monopolio y una nómina inflada, dirigiendo su reclamo a las gestiones anteriores del PAN, y se manifestó extrañado de que en la capital se hubiera premiado a Varela Pinedo después de su desempeño como alcalde.
A su vez, el presidente municipal de Villanueva, Rogelio González Álvarez, denunció que la gestión de las demandas laborales es una problemática seria, describiéndola como una “mafia” que sigue hundiendo a los ayuntamientos financieramente.
María Guadalupe Ortiz Robles, alcaldesa de Valparaíso, indicó que su demarcación enfrenta 25 millones de pesos en pasivos y solo recibió 4 mil pesos en cuentas al asumir el cargo. Aludió a las dificultades para pagar un millón de pesos en recibos de luz, lo que podría afectar incluso a los pozos de agua en el campo.