17.8 C
Zacatecas
jueves, 25 abril, 2024
spot_img

■ Comentarios Libres

Lograr la paz total en Colombia

Más Leídas

- Publicidad -

Por: SOCORRO MARTÍNEZ ORTIZ •

     Se inició, el pasado lunes, el Segundo Ciclo de Conversaciones entre el Gobierno colombiano de Gustavo Petro y la guerrilla de aquel país denominada Ejército de Liberación Nacional (ELN). La reunión se realizó en la Ciudad de México, en el edificio de la Antigua Conferencia Interamericana de Seguridad Social. En su mensaje de bienvenida a los negociadores y representantes de los países garantes, el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, deseó éxito y saludó, a nombre del Presidente López Obrador, a: Otty Patiño, jefe negociador de la delegación del gobierno de Colombia; Pablo Beltrán, del ELN; María José Pizarro Rodríguez, senadora; Carlos Ruiz Massieu, representante especial del Secretario General de la ONU y Jefe de la Misión de Verificación; Silverio Suárez, General, y quien también es sacerdote de la Iglesia Católica, muy cercano al comandante de la Policía, Henry Sanabria. Los diálogos son respaldados por Noruega, Chile, Cuba, Venezuela y Brasil como países garantes y acompañados por Naciones Unidas y la Conferencia Episcopal de Colombia.

- Publicidad -

     El actual proceso de pacificación tuvo su origen en 2017, durante el gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018), primero en Quito, y después en La Habana. Sin embargo, la mesa fue suspendida por más de tres años, luego de que el ELN atacara con explosivos una escuela de policía en 2019, con un saldo de 22 personas muertas. 

     Posteriormente, en noviembre de 2022, el diálogo fue retomado por Gustavo Petro, primer Presidente de tendencia izquierdista en Colombia, y quien en su juventud militó en la ya extinta guerrilla del M-19. Esta nueva etapa ha tenido sedes itinerantes entre los países garantes: el primero, fue en Caracas, Venezuela, y el segundo, en Ciudad de México.  

     La agenda de la mesa de diálogo contempla tres puntos: 1.- la participación de la sociedad civil; 2.- la democracia para la paz, y 3.- cese al fuego. El jefe de la delegación del gobierno ha manifestado que, lo que se acuerde en la mesa, se deberá implementar en los territorios, aclarándose que todos están sujetos a ser mejorados por lo que diga la gente. Es decir, lo acordado no es omnipotente ni infalible.

     Por su parte, el representante del ELN, Pablo Beltrán, reivindicó la lucha armada de esa organización, pero reconoció que obedecen el mandato de cambio expresado en las manifestaciones sociales de 2021 a las que atribuyó la elección del gobierno de Petro.  Igualmente señaló que este proceso de paz no va a producir una revolución por contrato ni va a decretar una desmovilización automática de las rebeldías, por lo que se debe trabajar por fundar un proceso de transformaciones de corto, mediano y largo plazo que sólo es probable si está soportado en una gran alianza nacional, construida sobre una visión común de paz. Además, se acordará la agenda definitiva de conversaciones, pues se continuará con el criterio de hacer acuerdos que se implementen de inmediato, o como los que están en curso, para dar alivio humanitario a las regiones que más sufren sus comunidades a causa del conflicto interno, así como de lo que denominan “presos políticos”. 

     El ELN se fundó en 1964 por un puñado de jóvenes estudiantiles colombianos que se encontraban deslumbrados con la Revolución Cubana. Detrás también estuvieron miembros de la teología de la liberación, por lo que tiene unas fuertes raíces católicas. No es tan poderoso como en su tiempo lo fueron las Fuerzas Armadas Revolucionaras de Colombia (FARC), que libraron una guerra directa con el Gobierno de Colombia. El ELN pasó por una crisis profunda que casi lo lleva a su desaparición, pero un cura español de un pueblito de Zaragoza, Manuel Pérez, lo rescató y revitalizó en los años ochenta del siglo XX. 

     Con el tiempo, se ha transformado en una organización difícil de clasificar, que cuenta con algo más de 2,300 combatientes. Los viejos mandos eran muy idealistas, pero los jóvenes que les han reemplazado son más realistas.

     Conseguir que el ELN se convierta en un partido político, es solo el inicio de lo que el Presidente Gustavo Petro llama “paz total”, que supone avanzar con todos los grupos armados del país. Una tarea titánica en un lugar como Colombia, que ha ido superponiendo un conflicto a otro a lo largo de su historia. Con estas negociaciones, el gobierno pretende que los guerrilleros entreguen las armas.

     El hecho más importante a producir será la participación de la sociedad civil para las transformaciones para la paz. Esto implica que debe darse en territorios concretos, donde el ELN no solo tiene una fuerza militar, sino un liderazgo capaz de promover el poder de las comunidades, el respeto a la naturaleza, y la superación de una cultura de la violencia. Pretende que estos diálogos permitan el logro de una paz integral y duradera, que resuelva las causas que generan a diario el conflicto social, político y armado. 

     Ojalá se logre la “paz total” para Colombia, propuesta por el gobierno de Gustavo Petro, para quien no ha sido fácil llevar a cabo estos trabajos, ya que enfrenta una sobrerrepresentación de la oposición en el Congreso.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -