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viernes, 29 marzo, 2024
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Endeudarse para estudiar, uno de los principales problemas que enfrentan los jóvenes: académico

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Por: MARTÍN CATALÁN LERMA •

Puntualiza que es muy común en EU, pero en México ya surgen casos de este tipo

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La deuda estudiantil ha provocado una reducción en la matrícula de 30% en el vecino país

México no ha logrado generar más de 300 mil nuevos empleos por año; la cantidad de egresados universitarios es mayor que la capacidad de generación de plazas laborales

Por origen racial, son los autodenominados “blancos” quienes tienen más acceso a la educación superior, seguido de asiáticos, latinos y afrodescendientes: Roberto Rodríguez

 

En los últimos años, la educación superior en México y Estados Unidos se ha expandido notablemente, pero en ambos casos se enfrenta el problema creciente de la empleabilidad y de las deudas de los estudiantes, afirmó Roberto Rodríguez, director del Programa Universitario de Estudios sobre Educación Superior de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El especialista impartió la conferencia “Problemática de la educación superior en Estados Unidos y México”, en el Segundo Coloquio Internacional de Investigación sobre Gobernanza y Educación Superior en la Región de Norteamérica, organizado por la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ) y la UNAM.

Expuso que, en el caso mexicano hay 4 millones de estudiantes en licenciatura y más de medio millón en posgrado, lo que significa que egresan 800 mil estudiantes cada año y 400 mil titulados en ese mismo periodo.

Sin embargo, México no ha logrado generar más de 300 mil nuevos empleos por año, de manera que la cantidad de egresados universitarios es mayor que la capacidad de generación de plazas laborales en todas las ocupaciones.

Explicó, entonces, que se está produciendo un choque con una doble vertiente: primero, que hay una creciente tasa de desempleo de los estudiantes y, contra lo esperado, las mayores tasas de desempleo se presentan en cuestiones de tipo tecnológico, porque el sector manufacturero y tecnológico en el país es el que ha ofrecido menos posibilidades de renovación de los empleos; y segundo, son los jóvenes egresados quienes consiguen acaparar los empleos formales cuando estos se crean, lo que produce el efecto de inhibir las posibilidades de colocación de quienes no cuentan con educación superior.

Para el caso de Estados Unidos, Rodríguez señaló que el reto para la educación superior en ese país es la sostenibilidad financiera, especialmente por fenómenos complicados como el de la deuda estudiantil que está provocando reducción en la matrícula. Para ello, será necesario buscar nuevas políticas para enfrentarlo.

En la actual administración de Biden, dijo que se plantea condonar deudas a diversos grupos de adultos y la disminución de las tasas de interés para hacerlas pagables.

En el contexto de la pandemia, expuso que en el vecino país del norte se estima la disminución de la matrícula en 30 por ciento, especialmente de estudiantes extranjeros, por lo que está pendiente la solución que se pueda encontrar para recuperar la dinámica de crecimiento de alumnos, de la que depende la sobrevivencia de las instituciones universitarias.

Informó que el 22 por ciento de los jóvenes entre 30 y 34 años tiene deudas estudiantiles, mientras que el 15 por ciento de todos los adultos en Estados Unidos tiene deudas por pagar por su educación universitaria, por lo que “no es de extrañar que la matrícula vuelva a disminuir por ese factor, lo que también va a provocar un problema para los instituciones: dejar de recibir estudiantes porque viven de ellos y de las ayudas federales que reciben a través de las becas que los estudiantes contratan”.

Rodríguez indicó que, un tema importante en Estados Unidos es que, en promedio, quienes estudiaron educación superior adeudan 17 mil dólares, pero quienes hicieron un posdoctorado adeudan hasta 45 mil dólares.

“El problema reside en que una parte importante de la población joven adulta no podrá emprender nuevas deudas hasta que no pague el estudiantil. Son deudores a largo plazo porque las contrataciones federales son a 20 años o más”, puntualizó.

Según expuso, ese nivel de endeudamiento hace pensar a los jóvenes si conviene seguir participando en la educación superior, porque eso significará una deuda de largo plazo con cantidades monetarias importantes.

Asimismo, informó que, por origen racial, son los autodenominados “blancos” quienes tienen más acceso a la educación superior, seguido de los asiáticos, los latinos y los afrodescendientes, aunque en los últimos años el grupo que más a ingresado a las universidades es el de los asiáticos.

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