■ Necesario, un consenso formal entre las instancias que representan la institución, dice
■ El documento plantea que ningún grupo político puede tomar decisiones en la UAZ
Con la intención de emprender una reestructuración académica y administrativa en la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ), tema que ha quedado en el olvido durante meses, Miguel Moctezuma Longoria lanzó una convocatoria a la dirigencia del Sindicato de Personal Académico (Spauaz) y Sindicato de Trabajadores (Stuaz), a la Rectoría y al Consejo Universitario, a discutir un nuevo proyecto institucional el próximo martes a las 11 horas en la Unidad Académica en Estudios del Desarrollo.
Según expuso, la condición más importante para promover una salida viable a la crisis financiera y de proyecto o modelo que vive la UAZ es la construcción de un consenso formal entre las instancias que representan la institución. “Ese consenso es necesario, pero sólo es posible si se hace de manera directa y sin mediación de los grupos políticos, mismos que deben de empezar a trascender su activismo a fin de poder integrarse al nuevo modelo de universidad que es necesario promover”.
Desde su punto de vista, se requiere de un modelo de universidad que deje atrás la simulación y los actos de corrupción, pero para ello se requiere perfilar una estrategia mínima e imprescindible para una reestructuración de la vida institucional universitaria.
Para tal efecto, dio a conocer un documento elaborado por un grupo de docentes para ponerlo a consideración de los universitarios, en especial de los convocados a una discusión el próximo martes, ya que “es un momento crucial en el que estamos compelidos a tomar definiciones”.
El documento plantea que ningún grupo político, por poderoso que sea, es instancia para la toma de decisiones institucionales en la UAZ pero, reivindicando el derecho de cualquier universitario a tomar iniciativas para su transformación, éstos deberán ser tomados en cuenta cuando sus promotores garanticen y se comprometan a la promoción de las actividades sustantivas desde las instancias institucionales.
Entre las estrategias que se plantean, está la promoción al nivel licenciatura de todos aquellos docentes de preparatoria que cuenten con grados académicos de posgrado, a fin de abrir otras opciones educativas acordes con su perfil. “Con esto, abriremos espacios laborales para aquellos docentes que figuran entre lo no respaldados financieramente en el subsidio ordinario”.
También señala la necesidad de incursionar en nuevas opciones educativas, tales como la Antropología, la Sociología, los Estudios del Campo de la Educación, los Estudios de Género, la Ingeniería Mecatrónica, la Ingeniería Ambiental, la Tecnología para la Vida y la Estadística, entre otros, sin descuidar aquellos programas en los que la UAZ es un referente.
“La UAZ se comprometerá a diseñar una estrategia de su oferta educativa considerando como criterio espacial, la concentración poblacional de la entidad, su vocación productiva y su potencialidad. Con ello se pretende concentrar los programas educativos en los Campus de Zacatecas-Guadalupe, Fresnillo, Jerez, Pinos y Río Grande. La concentración de la oferta educativa que se ofertará se centrará en el nivel de licenciatura y posgrado. Aquellos programas educativos, dispersos en el territorio zacatecano serán concentrados en estos campus que se proponen”.
Por otra parte, propone que los programas de licenciatura y posgrado que no han logrado evaluarse deberán reestructurarse profundamente y de ser necesario, desaparecer, para dar origen a otros nuevos una vez que reúnan los requisitos mínimos tendientes a su evaluación y reconocimiento.
En el tema de los sueldos, salarios y prestaciones, “nadie debe estar por encima de lo reglamentado y aprobado por las autoridades de educación. El Rector y demás funcionarios han de poner el ejemplo”.
Sobre el número de trabajadores, se expone que éste debe de sujetarse a lo respaldado financieramente, cuyo criterio de orientación debe ser el indicador entre trabajadores y alumnos.
Asimismo, el documento expone que la investigación aplicada debe ser el vehículo de inserción en el contexto local, regional y nacional, por lo que se requiere plantear la provisión de servicios, consultorías y la producción y diseño de productos y prototipos que permitan el registro de patentes.
