De acuerdo a la derechohabiente Alejandra, quien tenía programada una cirugía para el 9 de abril de 2024, personal del IMSS – Hospital General de Zona No. 1 – Dr. Emilio Varela Lujan, subieron a los pacientes a preparación para cirugía, realizaron el protocolo correspondiente y los tuvieron esperando 2 horas sin información sobre la programación que se llevaría a cabo.
Después de dos horas de espera, médicos y enfermeras encargadas, les comenzaron a avisar a algunos de los pacientes que sus cirugías no se llevarían a cabo por “no tener el material” necesario para la realización de las mismas.
De acuerdo a Alejandra, los pacientes no se mostraron molestos con los médicos, pero se escuchaban quejas “nomás nos picaron para nada”, puesto que todos los pacientes estuvieron con catéter desde su llegada, mantenían un ayuno desde las 7 horas, lo que implicó que hubo pacientes que estuvieron 12 horas o más sin alimento ni bebida, y a final de cuentas, su cirugía no fue realizada.
El testigo, comenta, que lo más duro fue ver cómo un paciente estuvo en espera más de 4 horas, en asientos incómodos, y éste iba a una cirugía de cadera, sumado a esto, los elevadores no servían, y no se le ofreció alguna camilla para descansar.
Otra de las denuncias es que a ciertos pacientes se les notificó que la sangre que habían recolectado de sus donadores estaba en riesgo, que, al no haberse realizado la cirugía, la sangre pasaría a otros pacientes y ellos tendrían que volver a buscar donadores para cuando se les citara nuevamente.
Algunos de los pacientes tenían cirugías difíciles e importantes como retiros de masas cancerígenas o reemplazo de cadera, y también hay que contemplar que no todos los pacientes son de la zona conurbana Guadalupe-Zacatecas, sino que la movilidad de sus zonas de residencia hasta la capital implica gasto de tiempo y dinero.
