Nuestro presidente externó que Claudio X González se convirtió en el líder de la derecha; por su capacidad de someter y decidir por encima de los partidos que la representan (PRIANRD), por ser ideólogo de la campaña electoral de Xochilt Gálvez, y por subordinar a los intelectuales tradicionales y orgánicos de las fuerzas retrógradas; Aguilar Camín y Enrique Krauze.
El presidente acierta. Esa observación resulta fundamental para comprender la disputa política. Deja en claro por qué prefirieron a Xochilt Gálvez como candidata que, en apariencia (en eso calcularon mal), es más mediática por su espontaneísmo y ocurrencias por encima de una política probada, organizada, planeadora, de proposiciones estratégicas como Beatriz Paredes.
Las posturas ideológica-políticas y conducta de Claudio X González, y de todos los que representa (extranjeros y nacionales) se origina del voraz apetito económico, de la necesidad de recuperar medios que les permitieron no entregar impuestos a la hacienda pública, retomar las fuentes succionadoras de recursos públicos, de los que ellos no contribuían y tener de su lado a una clase política, especialmente los órganos judiciales, para desposeer a las clases sociales débiles.
Por eso, transpiran prácticas ideológicas y políticas de un exacerbado clasismo y discriminación. El uso de epítetos como el de “chairos” trasparenta la intensión de agredir con burla y mofa a quienes pensamos y actuamos diferente. Es la ventana que permite ver el grado de frustración, odio, rencor, sed de venganza, prepotencia y la falsa apreciación de que son seres superiores a los demás.
Así entiendo los berrinches y las expresiones altisonantes ya inocultables de personajes que pasaban por “honorables” y “educados”. Se les podía mencionar como ejemplos de superación personal a Claudio X González, Salinas Pliego, Martín Moreno, Carlos Alazraki, Aguilar Camín, Beatriz Pagés, Javier Lozano, Jorge Castañeda y ahora a Juan Pablo hijo de la candidata “indígena” Xochilt, persona mayor de edad, responsable de un cargo político electoral del PRIANRD enfocado a los jóvenes, todos ellos mostrando su auténtica personalidad social, política, ideológica, psicológica alejada del interés por el bien común, del interés nacional, sólo velando por la intensión de acrecentar sus riquezas, aunque haya que pasar por encima de las leyes y demás ciudadanos.
La derecha corrupta y su herramienta de política-electoral (PAN-PRI-PRD) no pueden revelarnos sus intenciones. Nos mienten. Decir la verdad sería:
Pretenden un gobierno que les permita no entregar a la hacienda pública los impuestos que nos cobran a los consumidores y dejarlos para ellos por la vía del robo oficializado (65 mil millones de pesos, solo en el caso de Salinas Pliego, mucho más que todo el presupuesto de un año para Zacatecas).
Pretenden que el gobierno les entregue servicios públicos a los cuales puedan exprimirles riqueza, como la CFE, PEMEX, IMSS, ISSSTE, SEP, proceso que ya antes hicieron al recibir a precio de quiebra y remate a TELMEX, FERTIMEX, ANAGSA, BANRURAL, FERROMEX, PRONASE, Altos Hornos de México, Minas como Cananea, CONASUPO, IMEVISION (hoy TVAZTECA) incluso cárceles, pues ya tenían varios en su poder, la venta de medicinas, con el argumento de que todo lo que administra el gobierno quiebra, etc.
Que baje el salario real, para disminuir los costos de producción, el salario alcanzaría para menos; retirar los programas sociales para redireccionar miles de millones de pesos al “rescate” de empresas, subsidiar a otras o inyectarle dinero fresco y directo con el pretexto de la innovación tecnológica, como lo hacían desde el CONACYT. El espacio se me agota. Resumo: procuran que el gobierno les entregue todo lo que produzca riqueza, que de lo que llega a la hacienda pública se presupueste para ellos. Eso significaría sacrificar a los más pobres. Pero no lo pueden decir. Algunas veces claman: “a trabajar huevones”. Como eso no les da votos, piden que el INE asegure que “gane quien gane los programas sociales no se retiran”. Sabemos que ellos votaron en contra y que siendo mayoría los quitarían del presupuesto.
Queda muy claro. La campaña de la derecha está basada en el ataque, en que todo está mal (¿entonces por qué dicen que defienden los programas sociales?), pero también en la mentira, en montajes escandalosos en contra del actual gobierno.
El gobierno de AMLO hizo más obras de infraestructura que los 6 gobiernos anteriores, y esas van a impactar mucho en la economía mexicana, pero dicen que no sirven, que es dinero que se tiró a la basura. Y es muy simple: la derecha ha hecho de la mentira, la difamación y la ignorancia el fentanilo ideológico y político del que se retroalimentan. Y, como todas las drogas (en este caso ideológico-políticas) tiene consumidores y quienes la distribuyan. Así, la enajenación se vuelve una nueva forma de miseria: les arrebata la capacidad de pensar en sí y para sí.
