Huixtla, Chis. Ocho horas después de que elementos de la Guardia Nacional y agentes del Instituto Nacional de Migración cercaron a los migrantes que partieron ayer de Tapachula, Chiapas, y disolvieron la caravana, aún continuaban los patrullajes y detenciones por parte de ambas dependencias en la cabecera municipal de Huixtla.
GALERÍA: Desarticulan la caravana migrante en Huixtla, Chiapas.
Fue a las 5 de la mañana cuando un centenar de elementos le impidieron el paso a la caravana que estaba apunto de salir y comenzaron las detenciones. Decenas lograron correr al río que se encuentra a un costado de donde pernoctaban, y otros tantos lo hicieron por los cerros y las calles aledañas.
A las 13:00 horas aún pasaba un convoy de unidades del INM y la Guardia Nacional haciendo detenciones de migrantes haitianos, hondureños y otros países.
Agotada y con un semblante de desesperanza, Diana, de Honduras, quien junto con sus hermanos se escondió entre la maleza por unas tres horas, se aproximaba a tomar una combi que estiman les cobrará 35 pesos por persona para regresar a Tapachula. Su segundo intento por ir a Estados Unidos en caravana, recalca, fue el último. Ahora esperarán en Tapachula el tiempo que sea necesario.
Más adelante un joven hondureño de unos 25 años de edad afirma que no se detendrá y espera llegar a Arriaga siguiendo las vías del tren. Para lograrlo deberá caminar más de 200 kilómetros en un trayecto que es famoso por los asaltos a migrantes.
