Leticia Torres Villa, excoordinadora del Departamento de Equidad de Género de la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ), quien mantuvo tomado el edificio de Rectoría desde el lunes pasado, llegó a un acuerdo con autoridades universitarias para concluir con su protesta; la institución, la Presidencia Municipal y el Gobierno del Estado atenderán las necesidades de infraestructura de la Casa de la Mujer.
Informó que el acuerdo consistió en cumplir con varias de las peticiones que ya se habían convenido el año pasado, entre ellas el pago de la renta de la Casa de la Mujer, en el Centro Histórico, a fin de que se continúe con el servicio a mujeres en condición de vulnerabilidad.
“Nos quería mandar al campus Siglo 21, pero tenemos tres espacios en donde la UAZ solo paga el área de Casa de la Mujer, el gobierno del estado paga el área de talleres y su servidora paga el área de mujer autónoma. Entonces no podemos estar á la voluntad del rector porque la tercera parte no puede estar sobre el 100, además de que el espacio está acreditado en el centro, a espaldas de Catedral”, explicó.
En ese sentido, dijo que las mujeres que se atienden no tienen las condiciones económicas para trasladarse hasta el campus siglo 21, por lo que ahora la Rectoría se comprometió a atender las observaciones que hizo la Cofepris y las necesidades básicas del personal en términos laborales y se seguridad social.
Torres Villa comentó que la administración central ofreció un calendario para cumplir con tales compromisos y de inicio ya enviaron a un arquitecto para revisar las condiciones, de manera que se aceptó y por ello concluyó con la manifestación.
Indicó que la Rectoría solo pagó la mita de la renta durante cuatro años, lo que muestra una actitud de “cerrazón y misoginia”, porque con estas prácticas ha demostrado “un problema de odio hacia las mujeres que no se disciplinan”
Recordó que durante mucho tiempo la universidad ha rentado espacios para diferentes actividades, por ejemplo, hasta hace poco se rentó un hotel para que fungiera como casa estudiantil, mientras que el propio rector trabajó en un espacio rentado cuando coordinó el departamento de Proyectos Federales.
Sin embargo, es hasta ahora con la Casa de la Mujer cuando ha dejado de pagar y además desacredita el esfuerzo que se realiza ese espacio, por lo que hay muchas incongruencias en el discurso.
Por último, Torres Villa detalló que el acuerdo fue que se realice una revisión entre la universidad, la Presidencia Municipal y el Gobierno del Estado para atenderlos problemas más urgentes del espacio y que se pueda continuar con el servicio.
