Tuvieron que pasar dos años para que, por fin, diputados y diputadas dictaminaran y aprobaran por unanimidad, reformas a las Leyes de Salud y de Educación del Estado de Zacatecas, en materia de acceso digno a productos de higiene femenina en centros escolares con población de escasos recursos y en los centros de readaptación social.
La iniciativa de reforma fue propuesta por el diputado morenista Armando Delgadillo Ruvalcaba desde el 4 de noviembre de 2021, y fue planteada con el objetivo de que las niñas, adolescentes y mujeres en edad reproductiva de escasos recursos, así como las mujeres privadas de su libertad en el estado, tengan un acceso digno a productos de higiene femenina tanto en las escuelas como en reclusorios, decretando que sean las entidades gubernamentales de Educación y Salud las que proporcionen el servicio.
“En pleno siglo 21, hablar sobre la menstruación resulta ser un tema incómodo, estigmatizado, lleno de prejuicios y hasta cierto punto vergonzoso. En promedio, una mujer pasa 3 mil días de su vida menstruando”, expuso el diputado en aquel entonces, quien señaló además que de acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en el año 2020, se estimó que en México hay 64 millones de mujeres en edad reproductiva, que necesitarían, en promedio, entre 500 y mil 200 pesos anuales para adquirir productos de higiene menstrual.
En el país, precisó, un paquete de toallas femeninas tiene un rango de precio que va de los 20 a los 100 pesos, lo significa que una mujer gasta un promedio 35 mil pesos en productos de higiene femenina a lo largo de su vida. En este sentido, dijo, la gestión de la menstruación es una posibilidad que no está al alcance de todas las mujeres. “La privación al acceso a estos productos ya sean, toallas, tampones y/o copas menstruales, es un factor que refuerza la desigualdad de género”.
En el caso de México, señaló, no existen datos sobre cuántas mujeres tienen acceso a una menstruación digna; no existen cifras, estudios o fuentes que demuestran de manera certera la pobreza menstrual en la entidad, lo que sí, de acuerdo con la Unicef, es que en México el 43 por ciento de las niñas y adolescentes prefieren quedarse en casa que ir a la escuela durante su periodo menstrual; 30 por ciento utiliza papel higiénico en lugar de toallas sanitarias; y 73 por ciento se lava las manos sin jabón.
En este sentido, señaló Delgadillo Ruvalcaba, el manejo de la higiene menstrual es un tema de derechos humanos y que tiene que ver con igualdad de género, salud sexual y reproductiva, además de educación, pero más importante, con la dignidad humana. “Si las personas no tienen acceso a instalaciones de baño ni medidas de higiene menstrual seguras y efectivas, no podrán manejar su menstruación con dignidad. Las burlas relacionadas con la menstruación, la exclusión y la vergüenza también socavan los principios de la dignidad humana”, aseveró.
En este tenor, a decir del legislador, el que haya acceso a productos para la menstruación es fundamental para el cumplimiento de los derechos humanos, pues también la mala higiene menstrual impide que las mujeres maximicen su desarrollo, ya que la vergüenza y la estigmatización cultural asociada a la menstruación y a la escasez de productos impiden que las mujeres vayan a la escuela y trabajen todos los días.
La reforma busca garantizar la distribución y el acceso de los productos de higiene femenina en los centros penitenciarios del estado de Zacatecas, por lo que el Estado, como garante de los derechos humanos, a través de las Secretarías de Salud y de Educación, deberá proporcionar de manera gratuita el acceso a productos de higiene femenina a niñas, adolescentes y mujeres adultas de escasos recursos y situación vulnerable en las escuelas públicas de la entidad, así como a las mujeres privadas de su libertad dentro de los Centros Penitenciarios locales.
La Comisión de Salud, encabezada por la diputada Karla Valdez Espinoza, consideró, dos años después, que es de vital importancia atender a los instrumentos internacionales que establecen que los Estados deberán de garantizar una menstruación digna para las mujeres, toda vez que impacta directamente en la salud y en la educación. Por ello, señaló que es pertinente que el Ejecutivo del estado debe programar para el ejercicio fiscal 2024 el impacto presupuestal que ocasionará la implementación de la reforma presentada, toda vez que es fundamental se destine presupuesto para la dotación de productos de higiene menstrual en escuelas y centros penitenciarios.
