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viernes, 29 marzo, 2024
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México Lindo y Podrido… y Zacatecas otro tanto ¿Es AMLO realmente un dictador como lo pintan?

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Por: JOSE DE JESUS REYES RUIZ •

Si la ciudadanía no tuviera ya un criterio propio y no hubiera madurado a costa de los golpes recibidos en toda su historia, actualmente ya estaríamos pensando y aceptando lo que difunden los medios masivos de comunicación, tanto electrónicos como impresos, de que vivimos al borde de una dictadura sólo comparable a la de Mussolini, sin necesariamente llegar a los extremos de un Hitler o un Stalin, pero en peligro de terminar así.

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Ya ni siquiera estamos hablando de editorialistas AMLO-FÓBICOS como los de televisa, y claro que me refiero a Leo Zuckermann, Jorge Castañeda Gutman y el mismo Aguilar Camín, que en varias ocasiones se ha referido al presidente como “un pobre pendejo” los constantes insultos de Krause y de tantos y tantos más, ya no digamos Alazraki, o la columna editorial de TEMPLO MAYOR del periódico REFORMA.

Ahora nos sorprenden personajes que alguna vez le fueron cercanos como RICARDO ROCHA, tan solo revisemos – les invito – su columna de hace un par de semanas, donde llena a AMLO de calificativos, muchos de ellos verdaderos, insultos que no podríamos encontrar más que en la boca de los más severos críticos del presidente. No olvidemos que recientemente escribió que SALGADO MACEDONIO había amenazado de muerte a LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, cuando lo que hizo – claramente inadecuado, pero no fue una amenaza de muerte – es amenazar con dar a conocer, las direcciones de los consejeros electorales como diciendo – sin decirlo claramente – que podían trasladar la protesta a sus propios domicilios, pero hay una enorme distancia entre esto, y lo que aseguro RICARDO ROCHA.

O simplemente comenta algún otro de los editorialistas, el fundador de CIUDADANOX, – MAURICIO MERINO – una organización que intenta formar ciudadanía informada, quien en su último editorial del universal asegura que lo que estamos viviendo es no una dictadura, sino un gobierno de corte fascista, con una especie de dictador-tirano al frente que decide absolutamente todos nuestros destinos, o Roger Bartra pensador de izquierda quien asegura que AMLO no es ni siquiera un POPULISTA DE IZQUIERDA, sino uno de DERECHA cuestionando absolutamente todo de sus actitudes al frente del ejecutivo.
Y estos últimos nombres que anotamos en el último párrafo son pensadores de izquierda, cuyo pensamiento me parece a mí, de alguna forma, lejano e incluso tendencioso a lo que realmente está ocurriendo.

Veamos algunos ejemplos de los temas controversiales que se han vivido en los últimos tiempos, el más reciente que ha provocado que los pseudo intelectuales, al servicio del pasado – ellos si no AMLO – al menos del pasado reciente, se hayan rasgado las vestiduras por la propuesta de López Obrador, que seguramente le dio primero a Ricardo Monreal con respecto a la prolongación de dos años en su puesto al presidente de la SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN ARTURO ZALDÍVAR.

Intentemos por un momento pensar lo que motivó al presidente a impulsar esta propuesta que han gritado en una especie de histeria colectiva como un ATENTADO A LA CONSTITUCIÓN. Es claro para muchos – o debería serlo – la enorme corrupción que impera entre los JUECES de la nación; solamente recordemos que en cuanto se aprobó la reforma energética, y sin seguramente haber tenido el tiempo de analizarla, un juez concedió un AMPARO para detenerla, amparos que posteriormente se multiplicaron exponencialmente con el objetivo de frenar una reforma que claramente dañaría los intereses particulares de muchos.

Y aunque este es un asunto particular que me gustaría analizar, posteriormente pero que no es el objetivo de estas reflexiones, el punto es que los jueces con el arma siempre discutible de los amparos, intentan frenar los cambios que por el bien de la nación – al menos en el pensamiento de AMLO y seguidores, nunca siervos – se están intentando implementar; ya ni qué decir del INAI, institución que muchos – antes de AMLO – tuvimos bajo un severo escrutinio en cuanto a su utilidad, al menos aquí en Zacatecas (IZAI).

Con respecto a los datos que el gobierno solicita – personales – de los usuarios de la telefonía celular, que multiplicados por 100, ya los habían solicitado las instituciones bancarias – sin que nadie dijera nada – cuando sale un tema como éste, es claro que los interesados en demeritar la imagen del gobierno salen a multiplicar por 100 o por 1000, los aspectos “negativos” de la propuesta. cuando AMLO claramente dijo: No se trata de todos los datos biométricos sino solamente la huella digital del usuario, con el objetivo de intentar reducir actos delictivos, lo que fue traducido por los malintencionados en que todos terminaríamos en la cárcel, si alguien nos roba el celular y le da mal uso.

Vamos, permítanme poner un ejemplo extremo, un juez concedió a una mujer que así lo solicitó, un amparo por los cambios realizados en el tráfico aéreo para organizar el buen desempeño de los 3 aeropuertos metropolitanos, el de la Ciudad de México, el de Toluca y el de Santa Lucía, y el amparo le fue concedido, porque según ella el nuevo tráfico le causaría problemas por el ruido, es decir, cada uno de los 20 millones de habitantes del área metropolitana, podrían solicitar amparos para detener los caminos que el gobierno electo por las mayorías intenta implementar.

Tendría que ser claro que: URGE UNA REFORMA JUDICIAL. AMLO lo sabe y trabaja por ello, el primer paso se dio en el SENADO, bajo el liderazgo de RICARDO MONREAL y la mayoría necesaria, después pasó a la CÁMARA DE DIPUTADOS, donde también avanzó no sin dificultades y el contra voto de algunos morenistas – así es el manejo de estos asuntos de la política –.

Ahora revisamos lo que dice la constitución en el sentido que, el PRESIDENTE DE LA SUPREMA CORTE, NO PUEDE SER REELECTO PARA UN SIGUIENTE PERIODO, PERO SEÑORES, NO DICE QUE SU ESTATUS NO PUEDA PROLONGARSE DOS AÑOS MÁS, no estamos hablando de una reelección, al menos es como lo ve AMLO y los senadores y diputados que votaron a favor, en fin, el asunto seguramente será frenado con una CONTROVERSIA CONSTITUCIONAL, que tendrá que definirse en la misma corte, y los magistrados decidirán si es válida o no lo es, pero los mexicanos no podemos apostar ni por la postura de AMLO, al decir que quienes voten en contra, serán cómplices de la corrupción, ni la opinión de los opositores a la 4T, que si pasa el tamiz de la SUPREMA CORTE, podrán asegurar que, la dictadura es un hecho y que vivimos en una nueva época fascista.

Por fortuna, basta asomarse a las redes sociales para ver que la congruencia sigue imperando entre aquellos que sí entienden lo que verdaderamente está pasando, y que siguen confiando – con sus asegunes – de los pasos que está dando el presidente por el bien del cambio real que muchos, no aceptan por razones obvias. ■

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