El modelo capitalista patriarcal y machista sistematizó la concepción de los cuerpos femeninos como objetos de consumo, lo cual deriva en la violencia de género en todas sus formas, afirmó la activista Olimpia Coral Melo, quien impartió este jueves, en la capital del estado, la conferencia “Prevención de la violencia digital”.
En ese sentido “lo importante hoy es comenzar a cuestionar sobre la sexualidad en línea, sobre la sexualidad online, el sexting. En los años 90, con los celulares análogos, no había digitalidad y en el transcurso de la digitalidad comenzamos a hablar de mensajería instantánea con contenido multimedia, es decir, fotografías, videos o audios de contenido sexual que intercambiamos a través de esa digitalidad”, expuso.
En este momento, dijo, lo importante es cuestionar si hay consentimiento y por ello hubo la necesidad de legislar en este sentido y que se garantice que los participantes estén de acuerdo con intercambiar ese tipo de contenido.
Explicó que en la actualidad se ha justificado una cultura de uso de los cuerpos femeninos bajo un consentimiento manipulado, pero poco a poco han surgido mujeres que han iniciado con la lucha por el reconocimiento de la violencia digital como delito.
Coral Melo refirió que hay la expectativa de que sí se logre la transformación de la que se vanagloria el Gobierno Federal a través de sus discursos; sin embargo, en Zacatecas, la imagen que tiene del gobernador David Monreal Ávila es muy triste debido a un acto de tocamiento que hizo durante su campaña electoral.
Comentó que, en el inicio del movimiento, se identificó que la mayor urgencia era que se reconociera la violencia digital entendida ésta no sólo como violencia sexual, sino como todo acto agravado y perpetuado a través de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Al respecto, señaló que la violencia digital contempla actos que atentan contra la seguridad, la dignidad, la privacidad y la vida digna de las mujeres que utilizan los espacios digitales, de manera que se pueden manifestar en diferentes condiciones.
De acuerdo con Coral Melo, en este proceso de reconocimiento de la violencia digital se insistió en una reforma que visibilizara que este fenómeno es un constructo de muchas cosas, no solamente lo sexual.
Aunado a ello, cuestionó el sistema de justicia penal, porque “¿de qué sirve que nuestros agresores están en la cárcel si nuestros videos íntimos, sexuales, no consentidos, van a seguir en las redes sociales? La violencia está sistematizada”.
