■ Propone, a consideración del pleno, modificar Ley de Turismo del estado
■ El objetivo, obligar a negocios de hospedaje solicitar a los huéspedes acompañados de menores, comprobar su relación de parentesco o bien, la mayoría de edad
Con el objetivo de combatir la violencia y el abuso sexual infantil en la entidad, la diputada local por el PRI y presidenta de la Comisión de Turismo en la 63 Legislatura, Lizbeth Márquez Álvarez, presentó en esta semana, a la consideración del pleno, una modificación a la Ley de Turismo del estado de Zacatecas para obligar a los establecimientos de hospedaje a que soliciten a los huéspedes acompañados de menores, comprobar su relación de parentesco o bien, la mayoría de edad del acompañante.
De acuerdo con la impulsora de la reforma, el Artículo 46 de la Ley General de Niños, Niñas y Adolescentes, establece que éstos tienen derecho a vivir una vida libre de toda forma de violencia y a que se resguarde su integridad personal, a fin de lograr las mejores condiciones de bienestar y el libre desarrollo de su personalidad, ordenamiento que también obliga a garantizar lo mismo a todas las entidades federativas.
“Alrededor de 1.2 millones de niños son víctimas de tráfico cada año. La industria de viajes, usada frecuentemente por los criminales para movilizar y esclavizar a sus víctimas, se ha involucrado activamente en el esfuerzo de hacer algo al respecto. Los viajeros también pueden poner de su parte, estando alerta ante actividades sospechosas y apoyando a las compañías que han sentado posición contra el turismo sexual y la explotación infantil” expuso la legisladora.
A la fecha, agregó Márquez Álvarez, más de mil agencias de viajes y cadenas hoteleras en 42 países, han firmado el “Código”, un documento en el que se encuentran consignados unos principios para luchar contra el tráfico infantil y el abuso, lanzado en Suecia en 1998 por Ecpat, una red global de organizaciones que trabajan para poner fin a la prostitución, pornografía y tráfico infantil con fines sexuales.
México, precisó, ocupa el primer lugar en abuso sexual infantil a escala mundial, de acuerdo Aldeas Infantiles SOS, una organización sin fines de lucro que, además, indicó que en cuatro de cada 10 casos el delito es cometido por familiares o gente cercana a los menores, sin embargo, es sólo una estimación porque únicamente 2 por ciento de los delitos se denuncia debido a que los niños se quedan callados por miedo, culpa o temor.
“La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) reportó que cada año 5.4 millones de menores en el país son víctimas de abuso sexual y, en 60 por ciento de los casos, el agresor es una persona cercana a la familia como padres, padrastros, tíos y vecinos. Lo grave es que por cada mil casos de abuso a menores, únicamente 100 se denuncian, solo 10 llegan a juicio y únicamente un caso alcanza condena”, argumentó además la priísta.
Asimismo, expuso que de acuerdo con el Inegi, en 2019 se detectaron 827 mil 898 usuarios de pornografía infantil; 60 por ciento de ésta se genera en México con fines de trata de menores. Sin embargo, en el país, sólo 3 mil 320 casos han sido clasificados por las autoridades judiciales como trata de personas, y se calcula que a diario 12 niñas son vendidas o usadas con fines de explotación sexual por tratantes.
En Zacatecas, agregó, las niñas y niños fueron las principales víctimas de delitos sexuales durante 2019, de acuerdo con la fiscalía especializada en atención de delitos contra las mujeres por razones de género de la Fiscalía de Justicia del estado de Zacatecas, que señaló además que del registro de estas carpetas, un 62 por ciento de las denuncias por abuso sexual, que fueron 217 en contra de menores de edad, van desde los cero hasta los 18 años.
“Una escena recurrente en muchos lugares de hospedaje, ya sean hoteles, moteles, cabañas turísticas, hostales o en cualquier establecimiento que ofrezca hospedaje vacacional, son el acceso a parejas donde una o ambos parecen menores de edad, o de grupos de aparentes menores de edad acompañados de uno o varios adultos, donde se puede percibir claramente que no pudieran ser familiares. Esta situación se da tanto con mujeres y hombres que se les permite el acceso con personas mayores de edad sin restricción o cuestionamiento alguno”, por lo que consideró que es importante que no solamente se legisle en acciones punitivas, sino también que se proponga acciones preventivas para combatir este “flagelo”.
“Con esta reforma se pretende establecer obligaciones para el que usa los servicios de hospedaje en nuestro estado, a efecto de que se identifique y compruebe su mayoría de edad o su parentesco si acude a alguna de dichas instalaciones acompañado de una o varias personas mayores de edad. Y para los prestadores de dichos servicios, la obligación de solicitar si hay duda de la edad o parentesco de quienes acuden a solicitar sus servicios de hospedaje que acrediten su mayoría de edad o su parentesco, con sus respectivas excepciones, así como su obligación de reportar ante las autoridades correspondientes posibles hechos delictivos en contra de niñas, niños o adolescentes para su atención correspondiente. Esto representa a nuestro criterio verdaderas acciones preventivas en beneficio de las niñas, niños y adolescentes de nuestro estado”, concluyó.
