■ Castañeda habló con Edmundo para que entrara la facultad de Contaduría en los proyectos
■ El problema era convencer al rector Silva de darle a Edmundo el manejo del dinero y tener claves bancarias y finalmente generaron una oficina de Proyectos Estratégicos en la FCA
■ Se hicieron dos grupos al interior de la Universidad: “el de la FCA, manejado por Nicolás Castañeda con ayuda de Edmundo Guerrero, y el de Ingeniería. Eran competencia”
■ El Modus Operandi era de expertos: el recurso llegaba a la UAZ, de ahí sacaban cheques y vaciaban la cuenta; había robos de identidad para completar información en bancos
Una fuente informativa que conoció el procedimiento y la manera en que se operó “La Estafa Maestra” en la Benemérita Universidad Autónoma de Zacatecas (BUAZ), quien solicitó anonimato, confirmó que Nicolás Castañeda Tejeda fraguó el proceso en conjunto con el entonces director Edmundo Guerrero Sifuentes.
“Lo que yo supe es que Nicolás habló con Edmundo para que entrara la FCA en los proyectos. El problema era convencer al rector Armando Silva Cháirez de darle a Edmundo el manejo del dinero y contar con claves bancarias y finalmente generaron una oficina de Proyectos Estratégicos en la FCA”.
“Estaba en proyectos Elba León, que era entonces muy amiga de Nicolás. Ella se sale de con Nicolás y se va a Ingeniería. Lo que indica es que se hicieron dos grupos al interior de la UAZ: el grupo de la FCA manejado por Nicolás Castañeda con ayuda de Edmundo Guerrero, y el de Ingeniería que tenía presuntamente el apoyo de Pedro de León. Eran competencia”.
Ante esa situación, afirmó que Castañeda Tejeda ofreció dinero a Silva Cháirez para que le cerrara las puertas al grupo que operaba los convenios en Ingeniería, y accedió, de manera que ambos hicieron trato para que tuviera todas las facilidades de seguir operando.
“En el despacho de Nicolás se manejaban las cuentas. Controlaban alumnos y también robaban identidades, entre las que había gente de otras partes de la República, como Toluca”.
“En los procesos no fueron las cosas tan sencillas. Varias veces en el banco les rechazaron documentación que originalmente les habían proporcionado de Sagarpa, pero hacían robos de identidad para completarla. El Modus Operandi era de expertos: el recurso llegaba a la UAZ, de ahí sacaban cheques y vaciaban la cuenta. Y ya manejaban el recurso desde cuentas nuevas desde el despacho de Nicolás. Para cumplir con las normas y reglas de operación de los programas contaban con una red de colaboradores en la administración universitaria y la Contraloría de la UAZ les armó las licitaciones a modo”.
Afirmó que toda la administración de la Unidad Académica de Contaduría y Administración, por acción y omisión, estaba a la disposición de esos proyectos, al grado que “la gente de Nicolás pedía las llaves del gimnasio y de la Lincoln”.
Según expuso, una dificultad especial era el trato continuo con el rector para tener todas las firmas listas a tiempo. Para ello, “Cuauhtémoc Rodríguez Aguirre era el encargado de manejar al rector, y de cuidar que nadie de ellos apareciera en nómina o gastos. Como secretario general de la universidad, tenía la posibilidad de facilitarlo todo”.
Luego de revelarse “La Estafa Maestra”, Nicolás buscó aliarse a Andrés Manuel López Obrador y compró al Partido Encuentro Social en Zacatecas, para tener contactos y forma de operar en el Gobierno Federal. Eso puede explicar por qué toman presa a Rosario Robles y nadie de Zacatecas ha sido procesado”.
