Zacatecas padece de un problema de costo de nómina magisterial que originó el Gobierno Federal de su momento. En el 2015 decide cambiar la lógica de administrar la nómina docente y eliminó el llamado Fondo de Aportaciones para la Educación Básica (Faeb), que se sustituyó con el Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa (Fone). Se trata de “Aportaciones” que se administran por el ramo 33; que consisten en los recursos que la federación destina a los estados para cumplir funciones sociales. Pero son recursos que están bajo el control de gobierno federal. En el salto del Faeb al Fone, el gobierno de Zacatecas a cargo de Alonso Reyes cometió el error de no hacer el reconocimiento de plantillas a tiempo, y por ello, una parte de las plazas quedaron fuera de la cobertura del Fone, y a cargo del estado. El asunto debió de resolverse en la siguiente administración, de tal manera que al reconocer que son plazas que deben estar a cargo del fondo federal y no del estado, todo debía quedar resuelto. Pero no ha ocurrido así. La entidad no puede sostener el déficit de 2 mil 200 millones de pesos, que rebasa el monto de los ingresos propios del estado en todo el año.
En el Faeb el estado administraba la nómina y en el Fone lo hace la Federación de forma centralizada. En el primer programa no había crisis y en el segundo sí. La declaración del Presidente apunta a regresar al esquema del Faeb. Lo cual implicará regresar a las entidades federativas la administración de la nómina; sin embargo, aparece como una declaración aislada, porque no hay aun algo que indique que se modificará la Ley que regula los fondos del ramo 33. Pero además, hacerlo implicaría un tiempo que Zacatecas no tiene. Se necesitan recursos extraordinarios a la brevedad.
El tema de la forma de financiamiento de la nómina tiene repercusiones hasta en el aprovechamiento de los alumnos. Una investigación sobre la relación de los esquemas de contratación con los niveles de aprovechamiento escolar, arrojó que en Secundaria había un estancamiento crónico en las competencias en lectoescritura y habilidades matemáticas (entre otras cosas) debido a que se contaba con pocos profesores de carrera y un exceso de docentes de hora clase, inestables y con trabajos externos. Así las cosas, se necesita no sólo que se tenga el recurso para completar la nómina magisterial, sino se haga bajo esquemas de contratación de carrera. El hecho de que los profesores tengan su tiempo completo con seguridad en el empleo, mejora el desempeño de su trabajo y, al final de cuentas, incrementa el nivel de aprovechamiento escolar. La baja inversión en educación detiene todo el desarrollo del país. La austeridad en el gasto educativo sale, al final del día, muy cara.
