7.5 C
Zacatecas
jueves, 28 marzo, 2024
spot_img

La urgente necesidad de fortalecer las Normales

Más Leídas

- Publicidad -

Por: RAYMUNDO CÁRDENAS VARGAS •

La función de las escuelas Normales, donde se han preparado los miles de profesores que han dado rostro al país, es esencial para el destino no sólo de la educación sino de todo el desarrollo nacional. Existen historias desde las misiones culturales a la integración del sistema de normales federales, rurales y estatales, hasta la penosa situación actual, y en todas esas historias la importancia de la formación magisterial está fuera de discusión. De alguna manera la Reforma Educativa pasada descalifica a estas instituciones, porque evaluará a profesores que, se supone, ya fueron evaluados durante su formación y con ello, calificados como aptos para ejercer el magisterio. Plantear evaluaciones periódicas como requisito para mantener la plaza laboral durante el ejercicio profesional, supone la desautorización de las normales. Nadie se opone ni debe oponerse a los procesos de evaluación para mejorar, porque son la clave para detonar los arreglos y mejoras. Y por ello mismo debemos preguntar, ¿no es más efectivo y confiable plantear un proceso de evaluación que no se reduzca a pequeños exámenes, sino que se realice durante varios años y se pueda con ello determinar que una persona tiene vocación de maestro y las aptitudes con las habilidades para desempeñar la labor docente? Pues bien, ese proceso puede darse justamente durante la formación del magisterio. En otras palabras: es mejor que se proponga a las propias escuelas normales como responsables de elegir bien a las personas que se dedicarán a la docencia y prepararlas con alta calidad.

- Publicidad -

Las escuelas normales deben fortalecerse porque en realidad son la clave para la verdadera evaluación docente. Un examen no dice mucho para alcanzar a calificar a una persona como apta o no en el desempeño docente. Esto no elimina la posibilidad de que las escuelas realicen sus propios procesos de evaluación a fin de mejorar su servicio educativo. Sin embargo, este debe ser integral y no convertirse en arma de vulneración laboral de los profesores. Si una estrategia de gestión de calidad necesita poner en peligro los derechos laborales de los docentes, eso es indicador de que es una estrategia equivocada. Así pues, debe haber evaluación, pero integral y desde la formación, y para ello, se debe fortalecer a las normales. Apoyarlas y dotarlas de los mejores recursos a fin de que puedan realizar su misión. Pero si el criterio de Competitividad que se ha venido aplicado se traslada a la formación, y se pone en duda la importancia de las normales, dado que la evaluación se hace fuera de ellas, entonces sí se estará poniendo en riesgo la estabilidad del sistema educativo. Si bajo el discurso de que el Estado recuperara la rectoría de la educación, se le entregó la conducción a un poder fáctico bajo la marca de “Mexicanos Primero”; entonces, podemos esperar que con el discurso de las competencias docentes se le entregue la formación de los maestros a más poderes fácticos. Y en este escenario, las Normales son un obstáculo.

- Publicidad -

Noticias Recomendadas

Últimas Noticias

- Publicidad -
- Publicidad -