Si se observan las redes sociales en México, o en cualquier otra parte del mundo, es probable que se vea mucha actividad por parte de los «Maxis» de Bitcoin. Estas personas creen que Bitcoin es el futuro de las finanzas. Además, creen que Bitcoin ofrece cierta salvación de lo que perciben como la tiranía de la moneda fiduciaria, particularmente la inflación y el dominio del dólar estadounidense. Algunas personas muy famosas se consideran «Maxis» de Bitcoin, incluido el fundador de Twitter, Jack Dorsey. Hay partidarios de Bitcoin en todas partes, y podemos mencionar a la senadora Indira Kempis como una de las defensoras más vocales en México.
En las redes sociales y otros medios de comunicación afines, a menudo verán explicaciones sobre el valor de Bitcoin. De hecho, lo llaman oro digital. La idea es que la oferta limitada de Bitcoin, con un máximo de 21 millones de tokens, lo hace resistente a la inflación. Los gobiernos imprimen continuamente moneda fiduciaria, que técnicamente es ilimitada. Con Bitcoin, solo habrá 21 millones, por lo que se convierte en una reserva de valor. Hoy en día, el precio de Bitcoin se encuentra en algún lugar entre los 25.000 dólares y 30.000 dólares. Su precio más alto alcanzó los 70.000 dólares en noviembre de 2021. Los partidarios más fervientes creen que valdrá 1 millón de dólares por token para 2030. Eso le daría una capitalización de mercado de alrededor de 20 billones de dólares, más que la capitalización de mercado del oro. Por tanto, creen que deben comprar Bitcoin ahora a largo plazo, entendiendo que su oferta limitada impulsará su valor.
Bitcoin se promueve como medio de pago
Y, sin embargo, al mismo tiempo se puede observar que Bitcoin se promociona como método de pago. Con frecuencia, en las redes sociales se pueden ver videos que demuestran pagos con Bitcoin, especialmente en lugares como El Salvador o Lugano (Suiza), los cuales abrazaron ampliamente la criptomoneda. Los videos podrían mostrar a alguien comprando una taza de café o una comida en McDonald’s (el McDonald’s de Lugano acepta famosamente Bitcoin). Estos videos se promocionan como impresionantes, un paso importante en la adopción global de lo que llaman el «estándar Bitcoin». En cierto sentido, es impresionante. Bitcoin es un sistema de pago peer-to-peer, por lo que al pagar esa taza de café o Big Mac se elimina cualquier autoridad centralizada como un banco. Sin embargo, la velocidad de pago no es más impresionante ni conveniente que el simple acto de usar una tarjeta de crédito o utilizar Apple Pay.
Pero aquí hay una contradicción mayor: ¿cómo es posible que Bitcoin se promueva tanto como medio de pago como inversión? Si sus pesos o dólares van a perder gradualmente valor debido a la inflación, y se supone que Bitcoin va a aumentar su valor en el futuro (como afirman los defensores más fervientes de Bitcoin), ¿por qué alguien utilizaría Bitcoin para pagar bienes y servicios básicos? No tiene sentido, es una contradicción. Podemos verlo desde otro punto de vista. Si a un inversionista en los mercados globales del oro le dijeran que podría comprar un café usando su oro, ¿lo usaría? ¿O utilizaría moneda fiduciaria? La respuesta es obvia.
Bitcoin es todavía una opción de nicho para pagar en línea
Por supuesto, el papel de Bitcoin como método de pago todavía es bastante limitado. En línea, podemos ver algunos ejemplos como los casinos de Bitcoin y criptomonedas. Se pueden realizar pagos en casinos en línea utilizando métodos como Oxxo Pay, PayPal, Todito Cash, PaysafeCard, tarjetas de crédito y débito. ¿Qué ventaja ofrece Bitcoin? Es difícil decirlo. Los depósitos no son técnicamente más rápidos que los métodos tradicionales mencionados anteriormente. Además, cuando juegas en un casino de criptomonedas, todos los juegos están denominados en moneda fiduciaria (pesos o dólares, según el lugar donde juegues). Por lo tanto, se puede ir depositando criptomonedas para ganar moneda fiduciaria.
Existen razones por las cuales las personas pueden querer jugar en casinos que aceptan criptomonedas, y nuestro objetivo no es descartar esas razones. Sin embargo, nuestro punto básico sigue en pie: gastar Bitcoin en jugar a la ruleta o a las tragamonedas es tan contradictorio como comprar una taza de café si se cree que Bitcoin es un activo que apreciará su valor con el tiempo.
Parece que Bitcoin debe ser una cosa u otra. Si es verdaderamente oro digital y, por lo tanto, aumentará su valor con el tiempo, ¿por qué alguien lo usaría como método de pago? Solo sería lógico si se pensara que Bitcoin disminuirá su valor con el tiempo. En los primeros días de Bitcoin, un hombre llamado Laszlo Hanyecz pagó 10.000 Bitcoin por dos pizzas. Se convirtió en un famoso error, aún se habla de ello hoy en día, ya que esos Bitcoin valen ahora más de 200 millones de dólares. Hanyecz es ampliamente ridiculizado por su falta de visión a largo plazo. Pero ¿cómo pueden los Bitcoin Maxis reírse de él y alentar a las personas a pagar bienes básicos utilizando la criptomoneda? Algo no cuadra. Es la paradoja de Bitcoin.
