Productores de frijol de Fresnillo y otros municipios de la franja norte del estado revelaron que prefirieron vender su cosecha a los intermediarios, mejor conocidos como coyotes, en lugar de buscar el beneficio del precio de garantía de 2022; la gran cantidad de trámites burocráticos y la tardanza en la liberación del pago fueron algunas de las justificaciones que expusieron.
Tras la apertura de los centros de acopio, fueron pocos los productores del grano que pudieron aprovechar los máximos beneficios ofrecidos por Gobierno Federal; otros campesinos, la gran mayoría, prefirieron buscar otro medio para recuperar su inversión, aunque el margen de ganancias fuera mínimo.
José Eleazar Ramírez Padilla es campesino y también presidente del Comité Técnico y de Aguas Subterráneas del acuífero Aguanaval y relató que, como organización, adquirieron una cribadora con el objetivo de mejorar la calidad del frijol, tanto de los usuarios como de algunos otros campesinos interesados en acceder a los apoyos del Gobierno Federal, pero la gran mayoría no pudo lograr el precio de 16 pesos por kilogramo.
La adquisición de la maquinaria fue con base en las necesidades y dificultades que como productores del grano presentaban y los dejaban fuera del acopio, pero los analistas consideraban que el frijol estaba demasiado sucio o no cumplía con los estándares de calidad requeridos para que se les pagara el máximo por kilogramo.
El precio de garantía que ofreció Seguridad Alimentaria Mexicana (Segalmex) de 16 pesos por kilogramo provocó que los intermediarios o coyotes también tuvieran que modificar los precios que ofrecían a los campesinos, y de 12 pesos que ofrecían en diciembre de 2021, lo aumentaron a 13.30 pesos para la mejor calidad de granos.
Ramírez Padilla dijo que los mismos usuarios de la cribadora le manifestaron que en la comunidad de Río Florido había un intermediario que pagaba por kilogramo 13.30 pesos, situación que fue aprovechada por muchos productores de la región porque dentro del acopio, el margen de ganancia sería mucho menor.
De 12 pesos que
ofrecían los coyotes
en diciembre de
2021, lo aumentaron
a 13.30 pesos
para el frijol de
mejor calidad
“Muchos de los productores nos contaban que les pedían dentro de los centros de acopio 100 pesos por tonelada únicamente para recibir el grano; al momento de hacer el muestreo les quitaban 12 por ciento de su producción, alegando que eran impurezas de la cosecha y además tenían que comprar costal nuevo, cargar en sus bodegas, y posteriormente trasladar el frijol; los campesinos hicieron las cuentas y de gastos reales les salía a 17.30 pesos por kilogramo, fue por eso que prefirieron ir con los coyotes”, explicó.
Otra de las cuestiones que los campesinos han manifestado son los criterios que toman los analistas para determinar qué granos sí y cuales no entran dentro del programa. Ramírez Padilla explicó que dentro del trabajo en la cribadora recibió cosechas con alto grado de calidad, pero el personal de los centros de acopio exigió la limpieza del grano y con ello se elevan los gastos para los productores.
Mencionó que de algunos casos donde el frijol fue rechazado, los campesinos sin más opciones vendieron a los coyotes su producción con todo y documentación, pero los intermediarios sí lograban que el frijol entrara al beneficio de 16 pesos por kilogramo, y con la maniobra se ganaron entre 3 y 5 pesos por cada kilogramo utilizando el folio del productor.
Para el ciclo agrícola del año anterior, dentro de la cribadora de la organización, se contabilizó un volumen de 2 mil 600 toneladas cribadas, ahora han sido aproximadamente mil 200 toneladas, esto se refleja en que los campesinos prefieren vender sus granos a los intermediarios en lugar de hacer el trámite en centros de acopio.
“Los campesinos dicen que no está muy debajo el precio de los coyotes por eso los eligen a cambio de todos los peros y trabas que les ponen en el acopio, que eso sí es lo que afecta a los productores, por ello piden que se busque una manera más accesible para que el productor entre y logre los beneficios”, indicó el presidente de la asociación.
Recalcó que lo necesario para apoyar a los verdaderos productores es la simplificación de los trámites porque se convierten en más gastos para quienes desean acceder al precio de garantía con una gran cantidad de requisitos que solicitan en los centros de acopio, los cuales pueden flexibilizarse y también las reglas de operación y con ello se pague rápido al productor que cumpla con lo establecido.
En los 38 centros
de acopio en el
territorio zacatecano,
se ofreció un
precio de 16 pesos
Según el programa, el pago debe de liberarse a más tardar al tercer día del acopio y los productores tienen testimonios de campesinos que después de diez días reciben lo correspondiente a su pago, esta tardanza orilla a que los productores prefieran el coyotaje que les paga de inmediato y en efectivo.
Dentro de los 38 centros de acopio que se dispusieron por las autoridades federales para recibir la cosecha de este año en el territorio zacatecano, se ofreció un precio de 16 pesos por kilogramo, pero la serie de trámites burocráticos y controles de calidad orillan a que los campesinos elijan el esquema de intermediarios para lograr recuperar poco o nada de su inversión total. Actualmente el pago va desde los 11 a 13 pesos por unidad de medida.
La estimación que se tiene dentro de este ciclo agrícola es que se sembró una superficie de 750 mil hectáreas en toda la entidad, donde se obtuvieron 365 mil toneladas de volumen de frijol. Las principales variedades son frijol negro, con 80 por ciento de la producción, que en su mayoría se destina a la exportación; después de las variedades de claros, con 20 por ciento de superficie, que es el que se consume en la zona.
