■ Según encuesta levantada en mil 100 predios, 68% tiene problemas de humedad
■ Se pretende formar una bolsa para apoyar a propietarios de fincas en malas condiciones: Junta
Tras presentar el estudio elaborado por el Laboratorio de Estadística y Matemática Aplicada de la UAZ, en el que se advierte del estado crítico en el que se encuentra el Centro Histórico de Zacatecas, debido al paso del tiempo, a las condiciones de humedad que imperan en los inmuebles y al abandono que estos han sufrido, se espera que para finales de año ya esté elaborado el proyecto de certificación de esta ciudad, para iniciar con la implementación de políticas públicas de recuperación.
El director de la Junta de Protección y Conservación de Monumentos y Zonas Típicas de la entidad, Rafael Sánchez Preza, expuso que en una de las vertientes principales que hay que atender, y que se trata de los edificios en malas condiciones que están habitados, se está buscando la posibilidad de conformar una bolsa de financiamiento para apoyar a los propietarios de estas fincas o a quienes deseen adquirir un predio en la ciudad para construir una vivienda.
En cuanto a esta posibilidad, comentó que ya estuvo presente en la entidad la Comisión Nacional de Vivienda que “tomó nota de la cobertura, de la necesidad que existe” de tener créditos hipotecarios para intervenir estas casas.
De esta forma, añadió, la institución federal puede tener una idea aproximada de cuántas personas estarían interesadas en obtener un financiamiento de este tipo. A partir de ahí, precisó Sánchez Preza, se podrá revisar “qué tenemos que hacer para accesar a ello, cubrir una serie de requisitos para que esos financiamientos, esos recursos hipotecarios, puedan bajar al interesado de acuerdo a su capacidad de pago”.
Estas bolsas de recursos son necesarias, expuso, porque hay propietarios que habitan en el centro, pero que no tienen el dinero suficiente para rehabilitar su casa.
Pero con la certificación del Centro Histórico de la capital zacatecana no sólo se enfocarán a la recuperación de inmuebles, sino a la adecuación de servicios básicos y al acondicionamiento de espacios públicos.
Por ello, concluyó que “ahora hay que presentar los proyectos específicos para que ya se certifique el Centro Histórico y venga la canasta de financiamiento para viviendas y venga también la canasta que tiene que ver con mejorar la infraestructura, agua potable, drenaje, alumbrado público, transporte público. Son una serie de canastas, de recursos que el estado, el municipio y la Federación comprometidos, buscarían canalizar para quienes quieran arreglar su casa, para arreglar la bóveda, para arreglar el drenaje, para arreglar la red de agua potable o el transporte público”.
También expuso, que para reducir el número de casas abandonadas, una opción sería revisar la política impositiva del ayuntamiento, por ejemplo con el tema del predial.
En este sentido, sostuvo que replantear este ámbito “es una buena medida para incentivar el repoblamiento, que el predial sea menor para inmuebles ocupados y que el predial sea mayor para los inmuebles baldíos; porque al estado y al municipio le cuesta llevar la infraestructura a esos inmuebles, estén ocupados o no”.
La tercera vertiente que se tiene que tener en cuenta, precisó el funcionario, es la de los edificios abandonados y la necesidad de encontrar a los propietarios, aunque precisó que esto ya es un tema jurídico y administrativo que depende del ayuntamiento capitalino, a fin de plantearles las posibles soluciones para rescatar esta vivienda.
Al hacer un breve recuento de lo expuesto en la presentación de los resultados de la encuesta, levantada en alrededor de mil 100 predios, de los más de 11 mil que tiene todo el espacio del Centro Histórico, Sánchez Preza expuso que 68 por ciento de las casas tiene problemas de humedad.
Esto, aparte de generar el deterioro visual que se aprecia en algunas de las fincas, deriva en un problema de salud pública, debido a que estas condiciones al interior de un hogar tienen consecuencias negativas en las cuestiones respiratorias.
En este sentido, también expuso que supone un riesgo para las personas el hecho de que en 18 por ciento de las casas se utilicen tinacos de asbesto, pues este material tiene sustancias cancerígenas.
El director de la Junta de Monumentos expuso que la densidad de población que arrojó la encuesta en el polígono de la muestra, es de unas tres personas por vivienda. Pero agregó que, para poder ampliar los resultados en otras zonas del centro, se prevé realizar otro estudio similar en un polígono diferente, en el que además se estima que hay mayor cantidad de residentes.
