Las campañas han llegado a su fin, la basura electoral quedará obsoleta a partir de hoy y empieza la supuesta etapa de reflexión, para que el ciudadano determine el sentido de su voto.
Me queda un mal sabor de boca, el proceso no parece avanzar, nuestra democracia parece no avanzar, nosotros como sociedad no hemos avanzado. Los debates difícilmente hicieron justicia a la palabra, la publicidad se centra en una imagen más que en una idea, las propuestas quedan siempre en el segundo plano, y las ideas en tercero, relegadas, siendo lo superficial y el ataque, la principal estrategia.
Pero eso en parte es culpa de nosotros, no quiero leerme pesimista, pero es a nosotros, a los ciudadanos a los que nos toca exigir mayor nivel, ser ciudadanos responsables y tratar de apartar nuestras filias y fobias para emitir un voto a conciencia.
Las estrategias electorales han sido las mismas en las últimas elecciones presidenciales, unos apelando al miedo como primer motivador del voto, el peligro para México, el comunismo-socialismo y los generadores de la pobreza, pero sin explicar en qué consiste la alternativa, la propuesta de cambio. Los otros, insisten en no reconocer los incumplimientos, no admiten que hace falta ir más allá en muchos temas, corrupción, justicia social, redistribución de la riqueza, seguridad, etc.
Tengo claro por quién votare en estas elecciones, no porque esté satisfecho con el actual gobierno, pero la oposición no ofrece mucho más de lo que ya hemos tenido, amiguismo, reformas a modo para los oligopolios, dominancia y control de la opinión pública, y eso, no es atractivo para mí.
Lo mejor de estas campañas, es que llegan a su fin, que por un tiempo dejaremos de estar bombardeados por discursos vacíos que prometen todo pero no dicen realmente nada, no enseñan, no ilustran, no hacen diferencia real entre unos y otros, porque todos prometen que serán lo mejor para el país, pero siguen sin contrastar el cómo, sin ataques, sin generar odio o rencor.
Necesitamos reformas político-electorales, necesitamos buenos perfiles en todos lados, da igual si son pro libre comercio, buscan el estado de bienestar, o son una mezcla de todo, pero los necesitamos en todos lados, incluidos los medios de comunicación.
El debate público del rumbo del país no puede existir si no nos centramos en las ideas, si no se exponen las diferencias y todo se centra en la negación de la realidad por un lado y la invención de otra realidad por el otro.
Lo único que está claro, para mí, es la importancia de salir a votar este domingo de forma masiva, expresar que queremos participar, por quien sea y por los motivos que sean, hay que votar.
Ya habrá tiempo de hacer reflexión sobre lo que queremos como sociedad, la clase de democracia a la que debemos aspirar, porque yo estoy muy lejos de sentirme contento por lo visto en esta contienda electoral, sea quien sea el ganador, como ciudadano, merezco mejores representantes políticos, que estén a la altura de lo que el país merece.